VEINTIOCHO

133 5 6
                                    

Ginés; Domingo 18 de Enero
13:15 pm

Llegamos a casa, y después de que mi padre aparque la furgo en el porche, nos bajamos todos de esta

Los demás entran a casa riendo por una tonteria que acaba de decir Jimena pero yo me paro acercándome a Leyre y agarro su brazo

-¿Que tal bonita?. La pego a mi pecho

-Bien. Suspira aferrada a mi -¿Tú?. Me mira agarrando mi cintura

-Ahi vamos, por suerte ya ha acabado todo. La vuelvo a abrazar pasando mis brazos por su cuello y pongo mi barbilla encima de su cabeza

-Vaya finde chaval. Rie triste

-Bueno, por lo menos te he visto un ratito cada día, si llega a estar el otro por ahi en medio seguro que hubiera sido mucho peor

Ella asiente con la cabeza dandome la razón

-Pues si, pero mira, hemos tenido suerte dentro de lo que cabe, aunque también te digo que en esta situación habria estado a tu lado si o si, seria mala persona si no lo hubiera hecho

-Eres la mejor persona del universo Leyre. Aseguro besando su cabeza

-Te adoro llorón. Se separa de mi despacio

-Yo a ti muchismo más bonita mia, tenlo claro

Besa mi mejilla suavemente y yo miro hacia la puerta asegurandome de que nadie nos ve para poder besarla sin preocupación

Tras hacerlo, dejo un dulce beso en sus labios, el cual ella me sigue encantada

-Nos van a ver Ginés. Sonrie cuando nos separamos

-Da igual, ya saben perfectamente que somos mucho más que amigos, incluso nuestros hermanos dicen que deberiamos ser novios, tendriamos que hacerles caso a los chavales, ¿no crees?. Rio

-¿Tu crees? No sé, no sé. Ríe también

-Si, diría yo que si

-Anda tira para dentro. Me besa de nuevo y entramos riendo

_

Leyre; Domingo 18 de Enero
13:20 pm

Entramos a su casa y su padre habla

-Chicos, id a la habitación de Ginés si quereis, la comida aún no esta lista

¡Vale!. Dice el anterior nombrado agarrando mi mano rápidamente

-No hombre, pero vamos a ayudarlos. Lo freno

-No no, tranquila cariño, ya nos ayuda Paco, Jimena y Rubén estan en el sofá, subid tranquilos, cuando esté terminada os avisamos. Dice esta vez su madre

-Bueno, vale, si no os importa... Les sonrio y Ginés y yo acabamos subiendo a su cuarto

-Por fin un poco de paz, madre mia joder, vaya diitas llevo. Se sienta al filo de su cama

-¿Has dormido mejor esta noche por lo menos?. Le pregunto imitando su gesto

-Si, algo mejor si, pero no te creas que mucho más que ayer ¿Tú que tal bonita?. Me mira dulce

-Bien, la verdad es que he pasado buena noche, me hizo bien verte más animado. Confieso

En ese momento, él no dice ni una sola palabra, simplemente se limita a tirarse a mis brazos como ha hecho hace un rato fuera, se nota que lo necesita bastante, y yo obviamente se lo voy a  corresponder todas las veces que él quiera

𝐄́𝐥 𝐧𝐨 𝐬𝐨𝐲 𝐲𝐨 [𝟏]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora