CUARENTAISEIS

108 5 0
                                    

Leyre; Miércoles 25 de Febrero
18:50 pm

Segundos después, aunque a mi me han parecido milenios, deja de mirarme y se acerca a Judith cogiéndola en brazos

-Hola princesa. La saluda sonriendo

-Hola guapo. Así lo llamaba yo también -¿Me columpias?. Le pregunta

-Vamos. La deja en el suelo y van hacia los columpios, ella se sienta en uno de estos y Ginés empieza a empujarla despacio

Los miro tierna y decido hacerles una foto, al final voy a acabar teniendo más fotos suyas que mias en el móvil, pero la verdad es que me da igual

-A ver, miradme. Digo llamándolos y ellos hacen lo que les he pedido sonriendo a la cámara -Preciosos

-Yo quiero haceros fotos, ponte tú aquí tata. Habla Judith contenta y se levanta del columpio

-Cógelo con cuidado que no se te caiga. Le doy mi móvil y me siento donde estaba ella hace unos segundos

-Hola. Saluda Ginés sonriendo

-Hola. Me sonrojo levemente

Empieza a empujarme por la espalda y cada vez que sus manos rozan mi piel me pongo más nerviosa y tensa

Me toca muy débilmente pero eso no quita que un enorme escalofrío recorra todo mi cuerpo todas y cada una de las veces que siento su cálido tacto en mi

-¿Estás bien?. Me pregunta desde donde esta notando lo tensa que estoy ahora mismo y al escucharlo hablar la piel de mi nuca se eriza por completo

Es increíble el poder que tiene sobre mi con tan solo rozarme joder

-No, no estoy bien. Admito en un susurro y en ese momento noto como se mueve y se coloca a mi lado agarrando la cadena del columpio para empujarme por ahí evitando incomodarme

-¿Mejor así?. Me mira

-Mejor. Confieso agradecida

Me empuja desde ahí sin tocarme y Judith no para de hacernos fotos

-Una sonrisita. Nos llama

-Calla y deja de hacernos fotos ya enana. Hablo

-Yo creo que sé cómo hacer que la gruñona sonría un poquito. Dice Ginés mirándome con picardía

-¿Ah si?. Lo pico -A ver listo, ¿como?

-Uy, ahora verás

Posa su mano en la zona de mis costillas y la aprieta haciéndome cosquillas provocándome una fuerte carcajada

-Ahora, ahora peque. Ríe para que Judith haga la foto

Río sin parar por sus cosquillas y en ese momento noto que me voy para atrás

-Ginés, me caigo. Digo y agarro su chaqueta para mantenerme en mi sitio

-Antes muerto que dejarte caer reina. Asegura posando su mano en mi espalda sosteniéndome con fuerza

La madre que me parió. Pienso al escucharlo decir eso último

𝐄́𝐥 𝐧𝐨 𝐬𝐨𝐲 𝐲𝐨 [𝟏]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora