24) Forever

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JIMIN

Penúltimo día en Tokio. Último paseo con Kook. Guardamos una de las mejores partes para este día porque mañana solo nos relajaremos y saldremos solo en las cercanías del hotel antes de viajar. Así que aquí estamos, conociendo el Palacio Imperial, donde vive el emperador de Japón. Fue idea de Kook venir porque obviamente ama todas estas cosas pero yo estoy fascinado con los jardines y parques que rodean el lugar. 
No puedo parar de sacar fotos. 

Hay ciertas partes a las que no podemos acceder por obvias razones pero todo lo que sí se puede visitar vale completamente la pena. Sin duda es una ciudad a la que quiero volver en el futuro. 

— ¿Sabías que el Palacio Imperial ocupa un 12% del área de la región especial de Chiyoda? — oigo comentar a Jungkook mientras yo intento capturar unas buenas fotos con mi celular para mostrarle a mi hermano luego. — Estamos hablando de unas 150 hectáreas aproximadamente. Y estamos en el corazón de la ciudad de Tokio. 

— Genial, amor — respondo. Ha estado todo el día deleitándome con estos datos y cosas históricas que olvidaré totalmente en dos segundos. Mi vida, juro que me hace morir de amor. Tengo un novio muy nerd. 

— Ocupa el mismo espacio que el antiguo Castillo Edo pero ya prácticamente no queda ninguna estructura original de él. Ni hablar de que bombardearon este lugar en la segunda guerra mundial. 

— Super interesante, Kook. 

— No, no lo es. Ni siquiera me estás escuchando. 

— Claro que sí. 

— ¿A ver en qué año dije que se construyó?

— En el mil...ciento...y algo — divago tratando de no reírme. 

— Ajá, ¿lo ves? No escuchaste que acabo de decir que en realidad era el antiguo Cast-

— Ya, mejor, ponte para la foto, amor — interrumpo antes de que me siga tomando examen. 

— Bien, bien — bufa. — Ya no te torturaré con historia — me sonríe y entonces posa para mí con el palacio de fondo. 

— Cuénteme todo lo que quieras, hyung. Pero no te prometo que lo vaya a recordar. ¿No te conté que me iba pésimo en la escuela acaso? 

— Lo hiciste. Eres un burro, Minie — me molesta. 

— ¿Para qué necesito ser inteligente si me junto con las personas que tienen todas las respuestas? — bromeo y lo señalo.

—  No voy discutir contra esa lógica — se ríe. 

— Solo necesito saber dos cosas en esta vida — le informo. —  Una, bailar, y dos, mantenerme alejado de ti cuando mires el Discovery Channel — bromeo. 

— ¡Oye! — protesta y yo echo a correr. Jungkook me persigue. Nos reímos, jugamos. Finalmente me alcanza y me tira al pasto. 

— Qué bruto, ¿acaso quieres doblarme el otro tobillo? — me quejo. 

— No necesitas mi ayuda para eso, Park. Sabes muy bien cómo meterte en problemas solo — se burla.

— Tampoco discutiré contra esa lógica — respondo y seguimos riendo. 

Amo molestarnos mutuamente como antes. Creo que eso siempre seguirá siendo divertido aunque seamos novios. 

Nos quedamos tirados ahí un momento, solo viendo el cielo, atesorando otro recuerdo más. Me da un poco de melancolía saber que ya mañana nos iremos. No tengo nada de ganas de regresar a Busan. Quiero decir, por lo único que volvería es para ponerme en búsqueda de una buena escuela de danza y ver a mi hermano. Pero nada más. 

Vacaciones Compartidas - KookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora