Amalia...
Despierto y ya es un poco tarde tengo que ir a la universidad, tengo asistencia perfecta, y no quiero arruinar eso, voy corriendo al baño, me doy una ducha rápida, me cepillo los dientes y después me visto, y seco un poco mi cabello con la secadora, y me lo ato en una coleta, siempre lo llevo asi, es práctico y cómodo.
Corro a la habitación de mamá, para que ella me lleve en el auto, pero como siempre ella no esta en casa, asi que no tengo de otra que tomar un taxi.
Salgo de mi casa y veo que Mario está afuera. —¡Hola Amalia! —Me grita desde la entrada de su casa.
—Hola, lo siento Mario, pero se me hace tarde para la universidad —Le digo mientras viene hacia mí.
—Y tu mamá.
—No está, por eso voy a tomar un taxi.
—No te preocupes, yo voy para la empresa de mi tío, y paso cerca de tu universidad, te llevo.
—Esta bien gracias, mejor contigo que con un desconocido. —Ummm, gracias, tomaré eso como un cumplido.
Mario saca su auto del garaje y me hace una señal para que suba.
—¿Por qué irás a la empresa de tu tío?
—¿Por qué el escogerá a 5 estudiantes de las 5 universidades más cercanas, y la tuya está incluida, y todos tienen que presentar un proyecto y ese proyecto mi tío lo tomará en cuenta, para los nuevos hoteles que el está construyendo en Argentina, y así el único estudiante, ya tendrá un empleo fijo en una de sus empresas, cuando termine la carrera en la universidad?
—Ahora entiendo.
—Pero creo que podrías ser tu.
—De verdad lo crees.
—Claro Amalia, eres la número uno de tu clase.
—Eso es verdad, pero hay muchos compañeros talentosos en mi universidad.
—Está bien, pero te deseo suerte y creo que puedes lograrlo.
—Aquel día en la fiesta, no pude saludar a tú tío, lo siento mucho.
—No te preocupes, el llegó un poco tarde.
—Y dice que no se acuerda muy bien de ti.
—Sí recuerda, cuando fue a tu fiesta de 18 años pero no pudo ver muy bien tu rostro, asi que lo conocerás en tu universidad.
—Talvez el hecho, del por qué no recuerda mi rostro, es porque un tarado me undió la cara en el pastel.
—Cuantas veces tengo que disculparme por eso Amalia. —Está bien, ya lo olvidaré.
Veo que ya voy llegando a la universidad, y solo faltan ocho minutos para que la clase empiece.
Antes de bajar, Mario me toma de la mano y me ve directo a los ojos y ha estado extraño últimamente.
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TAN SOLO UNA NOCHE
RomanceSoy una nerd con buenas calificaciones, pero mi mejor amiga me invitó a ese lugar, acepte para tratar de salir de la rutina, pero nunca imaginé que me confundirían con una prostituta, y me quitarían la virginidad esa misma noche, y lo peor, enterar...