TAN SOLO UNA NOCHE

LIV.

Al escuchar eso mis piernas tiemblan.

El hombre me dice el hospital, cuelgo la llamada le digo todo a Evelyn, ella me acompaña al hospital, creo que tendré otro ataque de ansiedad.

Llegamos al hospital, inmediatamente pido información de Sebastián, una enfermera me atiende y me dice que Mario es la otra persona que estaba con Sebastián.

—Esto es un milagro, Sebastián Ramsés tan solo sufrió de un golpe en la cabeza, no es grave despertará en unas horas y
podrá verlo, pero el muchacho, Mario Ramsés está realmente grave, lo están operando en este momento, se fracturó las costillas, y estas le provocaron un sangrado interno.

Me siento realmente molesta, se que esta mal lo que estoy pensando en este momento, pero creo que Mario tiene toda la cual de esto, puedo sentirlo en mi corazón, pense que él había cambiado, pero ahora me doy cuenta que sigue siendo el mismo.

—Amalia, ¿que es lo que estás pensando? Te quedaste un shock un momento, pense que te ibas a desmayar.

—Estoy bién, pero siento de que Mario tuvo algo que ver en esto.

—Pense que estaba loca, pero yo también pienso lo mismo — me dice Evelyn.

Esperamos por una hora hasta que la enfermera me dice que Sebastián despertó, mi corazón late más fuerte
inmediatamente, volteo a ver a Evelyn, ella también me mira muy emocionada.

—¿Podemos verlo en este momento? —Le pregunto a la enfermera.

—Si puedes pasar en este momento, pero esta un poco delicado, tiene migraña por el golpe, pero no se preocupe es algo normal por el golpe —me dice la enfermera.

La mujer me lleva a la habitación, Sebastián tiene vendas en la cabeza, inmediatamente corro hacia el y le doy un fuerte abrazo.

—Te amo, estaba muy preocupada, no se lo que haría sin ti — le digo mientras acaricio su rostro.

—Yo también te amo, y no te preocupes por nada, estoy muy bien solo fue un golpe, ¿cómo esta Mario? —Me pregunta.

—El esta muy grave se rompió las costillas y en este momento lo están operando, no te preocupes estará bien, pero ahora quiero que me digas la verdad, ¿Mario tuvo algo que ver en
esto? Sebastián no me dice nada el se queda en absoluto silencio, pero su silencio me lo dice todo.

—Mario provocó el accidente, se que el actuó mal, pero no quiero que le digan a la policía después de todo es mi familia,
lo que necesita es ayuda psicólogica, lo que siente por ti no es amor, lo que el siente por ti se convirtió en obsesión —me dice Sebastián.

Él tiene razón, no puedo decirle a la policía aunque ganas no me faltan, pero es el sobrino de Sebastián, además de alguien con quien compartir toda mi vida.

—No se preocupen por nada, saben que estoy a sus órdenes, cuando este bien de salud voy a darle terapia —Dice Evelyn.

—Gracias eres la mejor amiga del mundo, además de una excelente persona —le digo y ella me sonríe.

Le doy un beso a Sebastián, después otro fuerte abrazo, intento ser lo mas cuidadosa posible no quiero lastimarlo se que él esta delicado.

—Mi amor no te preocupes no me voy a romper, además cuando te vi se me quitó el dolor de cabeza, en este momento me siento realmente bien, no tienes que preocuparte —me dice Sebastián mientras acaricia mi rostro.

El doctor entra a la habitación, todos lo miramos atento a lo que nos tiene que decir.

—Buenos días, tengo todos los exámenes que le practicamos Sebastián, usted tuvo mucha suerte solo fue un golpe y nada
mas que eso, su cerebro esta en perfecto estado no sufrió ningún daño —dice el doctor—, pero en cuanto su sobrino, el
esta bien la operación resulto un éxito, solo necesita estar en reposo por un largo tiempo, pero nada más que eso, los dos fueron muy afortunados.