Finalmente, no fui a la cafetería, me dediqué a sacar todo lo que había en la maleta. Ahora me encontraba terminando de comer la segunda tableta de chocolate. Alexa seguía teniendo casi toda la bolsa entera así que no notará que le faltan dos, o eso espero.
Mañana ordenaré lo que me falta, todo estará listo y ordenado por fin.
Me levanté dejando los envoltorios en la mesa, me estiré y cuando miré el reloj sentí como mi cuerpo se desinflaba. Eran las tres y media y se suponía que con Axel quedé a las dos, cuando sus clases acabasen.
Rápidamente, agarré la llave de la mesita, la metí en el bolsillo del pantalón y me dispuse a salir de la habitación cerrándola con un portazo al salir. Solo espero no encontrarme con nadie antes de llegar al patio, no quiero hacer esperar de más a Axel.
Cuando llegué al patio exterior pude ver como apenas había gente. Antes que nada, observé la zona donde vi al de mantenimiento y la jefa de la cocina salir. Un escalofrió recorrió mi espalda y aparté la mirada de allí. Miré el banco donde habíamos estado esta mañana y ahí estaba el pelirrosa.
Me acerqué a él despacio. No me gusta hacer esperar a los demás y al verle solo, sentado en el banco mirando hacia abajo, sentí culpa por retrasarme.
-Disculpa Axel. -dije cuando estuve casi delante suya.
Él se levantó y me sonrió.
-Tranquila, no llevo esperando demasiado tiempo. Mis clases se retrasaron y llegué hace cinco minutos.
Asentí y respiré hondo más relajada.
- ¿Estás bien? -le pregunté.
-Claro. ¿A qué se debe esa pregunta?
-Ah, no, nada. -forcé una sonrisa.
-Y... ¿Cómo ha estado tu mañana? -preguntó algo apresurado- De seguro ha sido más entretenida que la mía.
-Seguramente. -dije sin pensar al recordar todo lo sucedido.
- ¿Qué?
- ¿Eh? -abrí mis ojos por completo al darme cuenta de lo que contesté, me llevé una mano a la cabeza y reí nerviosa. - Tan solo quise decir que fue una mañana entretenida, no digo que tu mañana fuese aburrida porque no lo sé.
Axel rió levemente y se sentó en el banco.
Avergonzada por lo que hice, me senté a su lado despacio, suspiré y nos quedamos en silencio hasta que él decidió romperlo.
- ¿Qué hiciste para tener un día tan entretenido como dices?
-Bueno, estuve hablando con algunas personas, arreglé mi habitación y poco más.
No iba a contarle que tuve que ir al despacho del director, ni tampoco decirle lo que vi con Alexa en el patio.
-Supongo que unas de esas personas era el director, ¿verdad?
Asentí y miré hacía el frente algo confundida.
- ¿Cómo lo sabes? - pregunté.
-Siempre que hay alguien nuevo, los llama para hablar y apostaría lo que fuese a que también te habrá mencionado si te apuntarías a algún equipo.
- Supongo que es el protocolo.
En ese instante, recordé como Alexa me dijo que me espiaba, ¿sería que Axel también me espiaba? No le dije en concreto que hablé y con Dante, pero supongo que lo sabía porque era nueva y como él también lo fue en su momento... Pues enigma resuelto.
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El Internado Horspeen I.
Mistério / SuspenseUna chica nueva llega al internado Horspeen con la ilusión de conocer a más personas de su edad y estudiar como una chica normal, alejada de los lujos y las asfixiantes restricciones de su madre. Sin embargo, Eileen no espera que el internado al qu...