El camino fue silencioso, tratamos de hacerlo lo mejor posible y conseguimos no hacer nada de ruido.
Cuando estuvimos lo bastante lejos, Axel me miró y se apegó a la valla.
-Tranquila, estarán bien.
-Eso espero, no quiero que tarden nada. No confío en Ross.
-Aunque no lo parezca, Ross en casos así es bueno.
- ¿Cómo que en casos así?
-De gastar el máximo cuidado. Traerá a Alexa y podremos salir de aquí.
Nos quedamos unos minutos más en silencio hasta que escuchamos pasos. Me apegué a Axel y los dos nos tumbamos en el suelo para que no nos viesen.
-Al jefe no le va a gustar esto. -dijo una voz grave.
-Debemos encontrarlos. -dijo otra.
- ¿Entraron en el...? -iba a preguntar uno.
-No os quedéis ahí zoquetes. ¡Seguid buscando antes de que salgan! -dijo una voz femenina, no tan femenina ya que su voz parecía la de Begoña.
Conforme iba pasando los segundos, estos se iban alejando dejándonos en el máximo silencio. Al cabo de otros minutos, Ross y Alexa aparecieron.
No puede evitar escapar una sonrisa al ver que estaba bien.
- ¿Los habéis vistos? -preguntó Ross.
-Hemos oído a dos señores y una señora, creo que era Begoña. -añadió Axel.
Al parecer sí que era ella.
-Ross y yo hemos podido verlos, se trataban de los guardaespaldas de Dante, Travis y, en definitiva, la matona. -añadió Alexa.
- ¿Y ahora qué hacemos? -pregunté.
-Por el momento, tenemos que salir de aquí. Mañana, estad atentos por si suena la alarma, Ross la hará sonar y debemos saber si ese azulejo es la entrada al cuarto piso.
- ¿Qué alarma? -preguntó Axel.
Alexa junto a Ross, le explicaron por encima de que alarma hablaban.
-Está bien, estaré pendiente. -dijo Axel.
-Dependemos de que haya algo más detrás de la baldosa. -terminó por decir Alexa.
- ¿Y qué pasa con la escotilla que nos acabamos de encontrar? -pregunté.
-Eso lo investigaremos más adelante, chica de las nieves. Ahora que sabemos esto, tenemos que averiguar primero lo que contó Ross y más tarde, de la habitación social.
- ¿Qué pasa en la habitación social? - preguntó Axel confundido.
-Ya te lo diremos más tarde, Axel. -añadió Alexa. -Ahora salgamos de aquí.
Al decir esto último, los cuatro salimos corriendo hasta llegar a la pared del gimnasio.
-Espero que corráis lo suficiente. -decía Ross- No quiero que me pillen, así que corred todo lo que podáis hasta las puertas.
Una vez terminó de hablar, salimos corriendo por mitad del patio. Se escuchaban nuestros pasos y no podía evitar ponerme nerviosa por si nos descubrían.
Ross fue el primero en llegar y abrió la puerta de par en par, nosotros tres fuimos los siguientes en pasar. Al estar dentro, el internado estaba en completo silencio y esto provocó que me pusiese más nerviosa.
-Vale, ahora, cada uno que vaya a su habitación y mañana nos reuniremos arriba en los bancos. -dijo Alexa cogiendo aire.
Nos despedimos y Alexa y yo fuimos a nuestra habitación.
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El Internado Horspeen I.
Mistério / SuspenseUna chica nueva llega al internado Horspeen con la ilusión de conocer a más personas de su edad y estudiar como una chica normal, alejada de los lujos y las asfixiantes restricciones de su madre. Sin embargo, Eileen no espera que el internado al qu...