NARRA GUSTABO;
Eran más de las 3 de la mañana y allí estábamos pasándola bien mientras tomábamos.
Hubo un momento de la noche en donde más de uno termino en el agua del mar gracias a retos que hacíamos.
Ahora nos encontramos en un círculo jugando a la botellita. Nunca pensé ver a Emilio besarse con Tonet y a un Raúl a punto de matar al mexicano. Más de uno termino en el agua para no dar el beso, ya que ese era el reto, si no quieres dar el beso con la persona que te toco, vas al agua.
Era mi turno de girar la botella, la tapa apunto a Juanjo, este al darse cuenta que era él el que me había tocado besar, se puso rojo como tomate. Sonreí con ternura y me acerque y le deposite un beso en los labios, volví a mi lugar que estaba al medio de Jacob y Yun.
Ya en mi puesto sentí como una mano se posaba en mí muslo izquierdo, gire la cabeza y vi que era la mano de Jacob. Este me sonrió para luego apretar su mano contra mi muslo.
Seguíamos jugando hasta que toco el turno de Yun. Este abrió los ojos exageradamente al ver quién le había tocado. Solté una risa junto a los demás al ver su reacción.
–No, ni de coña.–Dijo levantándose para quitarse nuevamente la camiseta, estaba dispuesto a volver a tirarse al agua.
–Si fuera Wilson, obvio que aceptas.–Le dijo Tonet con tono de burla.
–¡Pue' si, mila a Gus y mila a Calavela!–Exclamó mientras nos señalaba.–Quita tu puta mano de ahí.–Dijo sacando la mano del otro de mi muslo.
Iba a decir algo pero una llamada me interrumpió.
–Hum, disculpa.–Dije levantandome del suelo.–Tengo que contestar.– Me aleje hasta no escuchar las risas de los demás.
–¿Que pasa?–Pregunte a la otra persona que se encontraba en el otro lado de la llamada.
–Gus, te nesecito.–Escuche como soltaba hipidos.–¿Donde estas?–Me pregunto.
–Estoy ocupado, horacio.–Hable mientras prendía un cigarro.–¿Que nesecitas?–
–¿Estás con ellos?–Estaba borracho, se le notaba ya que se le trababan las palabras al hablar.–¿Por qué pasas más tiempo con ellos?–Le escuché llorar.–¿Por qué tu si puedes ser feliz?–Siguió llorando.
–Si, estoy con ellos.–Dije sonriendo mientras miraba como Gringo se tiraba al agua y Lamar le mostraba el dedo corazón.– Porque ellos me hacen sentir bien, hace tiempo no me sentía así, Horacio.–Bufé al escuchar cómo seguía llorando.–Encuentro demasiado hipócrita que me digas que por qué yo puedo ser feliz, cuando hace más de cuatro meses no sentía felicidad hasta que estos gilipollas aparecieron en mí vida.–Ahora mirando como Emilio le pegaba un culatazo a Raúl confirmé que eran unos gilipollas, pero ojo, son mis gilipollas. Solté una risa nasal por mí pensamiento.
–Horacio, dedique más de la mitad de mí vida en ver el bien para ti y no para mí.–Hable apagando el cigarro.–Nunca pedí algo a cambio por eso, eres mí hermano.–Solte un bufido. Ya no lo sentía como un hermano, era una persona más en mí vida, eso era.
–Yo no te pedí eso.–Hablo casi gritando, lo que hizo que alejara el aparato de mí oído.– Yo no te pedí que me cuidarás.–Volvio a hablar fuertemente.
–Seras malagradecido.–Dije susurrando.
–¿Qué?–Pregunto mientras soltaba hipidos.–¿Por qué malagradecido? ¿Tengo que agradecer por algo que yo no pedí?–Senti como me hacía pequeño por sus palabras.–¿Ahora me estás cuidado? No, no lo estás, estás de seguro follando con esos pringaos. Me das asco.–Senti como algo se rompía dentro de mí al escuchar eso. Lo esperaría de cualquier persona pero de él no.–No eres más que un juguete para ellos, como lo fuiste para él.–Las lágrimas se estaban asomando y empezaron a bajar por mí rostro al recordar todo lo que pasó con ese hombre.
–¿Te doy asco?–Pregunte con una voz casi inaudible.
–Si, Gustabo, me das asco.–Dijo hablando seriamente.
–Entonces tu y yo ya no somos ni hermanos ni amigos.–Dije tratando de sonar duro.–Ahora es cuando me doy cuenta de que no me conoces ni la mitad, yo no soy como tú, yo no me follo al primero que se me aparece.–Hable con rabia.–Cuidate, Horacio Pérez. Desde hoy tu y yo no somos más que unos desconocidos con recuerdos en común.–Colgue la llamada.
Intenté aparentar buena cara y caminé hasta donde los chicos. Mí vista se nublaba cada vez más y la ganas de llorar aumentaban por cada paso que daba.
Llegué donde los demás y ya no pude aguantar, mis lágrimas bajaban por mí rostro. Sentí como me abrazaban, levanté la mirada y me encontré con Juanjo abrazándome y los demás chicos mirándome.
–¿Gus, paso algo?–Pregunto Tonet mientras se acercaba lentamente y me abrazaba.
–Si no quieres hablar lo entendemos, chiquito.–Hablo Emilio mirándome para luego acariciar mí pelo.
–¿Ablazo glupal?–Preguto Yun abriendo los brazos. Me acerque rápidamente dónde él para sentir como todos se unían al abrazo.
En ese momento me di cuenta que estaba en el lugar correcto, con las personas correctas.
Esta si era mí familia y daría todo por ella.
☁︎
Que pasa gente bomnita?
Les está gustando cómo va quedando esto?<3
perdón por las faltas de ortografía [cry]
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𝐷𝑒𝑎𝑟 𝐹𝑎𝑚𝑖𝑙𝑦; 𝐺𝑢𝑠𝑡𝑎𝑏𝑜𝑤𝑙.
Fanfiction¿Era un traidor? si ser un traidor es encontrar una familia, un hogar. Pues si lo era. Gustabo simplemente quería sentir lo que sentía Horacio al estar rodeado de gente que lo quería, pero no se esperaba encontrar eso en la mafia en la que estaba in...