𝐷𝑒𝑎𝑟 𝐹𝑎𝑚𝑖𝑙𝑦; 𝐺𝑢𝑠𝑡𝑎𝑏𝑜𝑤𝑙.

25;

+18.

Narrador;

Gustabo se encontraba de camino a una tienda de trajes junto a Jacob, este le había comentado que nuevas telas finas y carísimas habían llegado a esa tienda tan famosa y un Gustabo emocionado quiso ir a verlas para su próximo traje, Roy no dudo en acompañarlo.

Si, no eran tiempos para andar de compras pero esto era una de las pocas cosas que a Gustabo lo distraía, y obviamente Jacob haría lo posible para ver al rubio con una sonrisa al menos.

Habían llegado al centro comercial después de unos cuantos minutos, pasaron por afuera de bastantes tiendas, pero una en especial llamo la atención de Gustabo haciéndolo sonrojar y a Jacob que iba hablando con él lo miro confundido para luego sonreir al ver el motivo del sonrojo del ojiazul.

— Se te veria bastante bien — Susurro el mayor agachándose al oído del menor, haciendo que este se sonrojara aún más.

— ¿Tu crees? — Pregunto el rubio mirando la tienda de lencería que había allí, un maniquí con un traje de mucama era un poco el causante de él sonrrojo del menor, pero lo que más le llamo la atención fueron las orejitas de gato y cola con un collar que traía un cascabel. — Me gustan las orejitas — Dice algo nervioso mirando a Jacob, quien le sonrió.

— Si quieres pasamos — Pregunto el de traje oscuro sonriendo con algo de lujuria en su mirada. Gustabo asintió algo tímido y tomo la mano de Jacob para luego entrar a la tienda.

— ¡Hola, buenas! — Saludo una joven muchacha luego de que entrarán a la tienda, ambos saludaron sonriendo. — ¿En qué puedo ayudarlos? —Pregunto haciendo sonrrojar a Gustabo.

— Oh, mi chico quiere ver el conjunto de gatito que está en el mostrador de la ventana. — Habla el pelinegro a la señorita mientras sentía a un Gustabo algo tímido y avergonzado esconderse detras de él. Sonrió y tomo con más fuerza la manito de este.

— En un momento se lo traemos, si gusta puede esperar en los vestidores para que el joven se vea al espejo con las orejitas y el collar. — Luego de decir eso se retiró para ir a buscar lo pedido.

Al entrar a la zona de los vestidores habían dos personas al parecer, un joven que esperaba en un sofá individual en frente de una de las puertas, quizás esperaba a su pareja.

Gustabo tomo asiento en un sofá para dos personas junto a Jacob. El mayor estaba tan concentrado tomando los dedos del ojiazul y hacerles cariño a estos que no percató de que el otro joven miraba descaradamente al menor hasta que sintió las piernas del rubio encima de las suyas, confundido miro al de baja estatura y vio como este miraba al otro chico frunciendo el entrecejo.

— ¿Que pasa, Cariño? — Pregunto el mayor en un susurro mientras acariciaba suavemente los muslos al menor.

— Joder, que ese gilipollas no deja de mirarme como si me quisiera follar. — Susurro algo molesto mirando al otro chico.

Jacob giro su cabeza en dirección del otro joven y lo vio casi babeando por el rubio. El no era celoso, para nada ya que no les decía nada a los demás chicos de la mafia pero siempre estaban esas ganas de decirles que buscarán a otro porque Gustabo era para él y solo para él, o bueno quizás si era un poco celoso. Frunció el ceño en el momento que vio como este le guiñaba un ojo a Gustabo.

¿Joder, acaso no estaba viendo que el rubio venía acompañado?

Sin pensarlo dos veces el mayor tomo de la cintura a Gustabo y si sentó en su regazo de frente a él. Miro de reojo al otro chico y lo vio desviar la mirada, sonrió para si mismo.