NATHAN
Ha sido el mejor fin de semana que he pasado en años. Me siento un hombre libre. No, no me siento, soy un hombre libre. Libre para amar y sentir. Me liberé de aquellas reglas, que antes lo eran todo para mí y ahora me parecen totalmente absurdas. Ya es lunes y Kayla y yo volvemos a la rutina, pero ahora esta tiene un nuevo color y más sentido. Luego de ella haberse entregado a mí de una manera preciosa, durante todo el día no hubo necesidad de salir de la habitación. Ella es toda una diosa en todo lo que hace. Todavía pienso en toda la situación y siendo sincero, estoy asustado. Jamás en mi puta vida había pensado que todo esto pasaría de nuevo y que llegaríamos a este punto. Pensaba que esto sería sexo de una noche. Debía haber sospechado que en cuanto esa mujer hizo que rompiera las reglas esa noche en la discoteca, todo iba a ser distinto. La verdad no me arrepiento de haberlas roto; Kayla es espectacular y ha florecido en mí sentimientos inexperimentados. La noche en la que la dejé ir, pensé mucho en toda esta mierda. ¡Por Dios, llevaba cuatro años con mis reglas! Las mismas que me permitían tener el control de todo. Hasta entonces pensaba que era un trato justo: control por placer. Todas quedaban complacidas y yo también. Había pensado eso hasta que Kayla me cuestionó el porqué ella habría de aceptar; fue en ese preciso instante que entendí lo estúpido que había sido. ¿Quién me habría creído que era? O peor, ¿quién creía que ella era? Fui un idiota al creer que Kayla habría aceptado como todas las demás lo habían hecho. Solo ella me hizo bajar de esa nube en la que me creía Christian Grey o algo más estúpido. Aunque debo confesarme a mí mismo, solo a mí mismo, que Grey me había inspirado en eso de los pre-acuerdos y toda esa mierda. Ahora que lo admito conmigo mismo, eso hace las reglas y la situación más estúpidas aún.
Adoraba a Kayla Micawell por abrirme los ojos, por eso y muchas otras cosas más.
Ahora que le estoy pensando le voy a enviar un email:
To: Kayla Micawell <KMicawell2312@gmail.com>
From: JAgostoPeña_69@yahoo.com
Asunto: Pensando en ti
No he encontrado las palabras justas para decirte lo que siento en este momento que te estoy pensando, pero sí una canción. Adjunto el enlace, pero para que tengas un adelanto dice así:
Por eso vivo, porque de tu belleza soy testigo. Quiero nacer y renacer otra vez contigo. Adentrarme en tus tierras y crecer. Por eso vivo yo, porque de tu migaja soy mendigo. Porque tu piel sagrada es mi abrigo y mi asilo. Bajo tu seno quiero fallecer. Pa' soltar el alma a tus pies. Resucitar en tus adentros, ser inmortal contigo. Si es que no lo has de saber por eso vivo yo...
Eres mi diosa, Kayla Micawell... Y sí, ya quiero volver a estar bajo tu cielo. Eres mi milagro...la que me ha salvado.
Ten un lindo día...
Lo envié y empecé a reír, ¿Quién eres Jonathan Agosto?
KAYLA
Llego a mi oficina y mi secretaria no está. Tampoco avisó que se iba a ausentar.
― ¿Cristina? ¿Sabe algo de Mikeyla? Su celular sale apagado.
― ¿Por qué habría de saber algo de ella?― dice indiferente
― ¿Cómo que por qué? Ustedes son pareja― digo lógica y alterada
― ¿Quién le dijo eso?― chilla asombrada
― Cristina, Mikeyla me contó todo. De verdad no hay problema― mi voz sale comprensiva
Su cara está llena de ¿coraje?
― Jefa, no es lo que parece. Mikeyla malinterpretó las cosas... Ella y yo...― comienza con evidente nerviosismo
― No es necesario ocultar nada, yo no estoy en contra de su relación. No quiero hablar de ello, es su vida privada. Ahora lo que me preocupa es dónde puede estar ella, nunca se ausenta sin notificarlo.
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Los mandamientos de Nathan
RomanceTodo estaba estrictamente controlado; su vida, su placer, sus emociones, sus relaciones... Su corazón era intocable. Sus mandamientos lograban que esa coraza alrededor de su corazón nunca se rompiera. Lo más importante; lo mantenían alejado de ese...