Musa.

32: Who.

Aquí hay al fin otro capítulo que creo me emocioné bastante al principio y al final ya no supe cómo seguirle pero al fin AL FIN está comenzando...creo, sé que parecerá que balbuceé pero confíen en mí

Nota larga al final del cap :c

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

"Estoy harto de esperar el amor, sé que no eres la indicada." -Lauv ft BTS.

...

A veces era realmente complicado poder exteriorizar tus sentimientos en palabras, Seungmin prefería las acciones. Lamentablemente, la mitad del tiempo él tampoco sabía cómo actuar para que las personas fueran conscientes de su afecto, simplemente hacía lo que otros hacían esperando que comprendieran.

No obstante, amar a alguien siempre se sintió distante, no era un sentimiento que Seungmin llegara a experimentar en todo su esplendor. Sintió atracción hacia personas que le parecieron atractivas, desde luego; sintió aprecio hacia algunos amigos (al menos cuando consideró que eso eran) e intentó cuidarlos...a su manera; se preocupó por personas cercanas, incluso puede decir que ama a sus padres.

Pero cuesta trabajo llegar a ese nivel, Seungmin tiene dificultad para lograr crear lazos emocionales con las personas que lo quieren, muchas veces no es reciproco, al menos de su parte. Se dice a sí mismo que los quiere, que los aprecia por el apoyo, pero sabe que no es tan profundo, que podrá vivir sin esa persona cuando se vaya. Era por eso que estaba aún más mortificado que de costumbre.

Doyeon y él estaban bien, realmente bien. Eran como todos los días desde que comenzaron a estar juntos; Seungmin seguía creyendo que era hermosa y ella seguía riendo de sus comentarios sin chiste, ¿dónde estaba el problema? Bueno, algo se sentía extraño en Seungmin cuando estaba con ella, especialmente al saber que Doyeon lo amaba y él no podía decírselo sin importar cuánto lo intentara porque no se sentía real, porque parecía estar mintiendo y diciéndolo por compromiso.

Hyunjin y él estaban mal, no parecía mejorar. Era una persona de costumbres así que le resultaba difícil deshacerse de los viejos hábitos, razón por la que seguía esperando a Hyunjin en el túnel a pesar de saber que él no iba a pasar por ahí; siempre que miraba su lado de la habitación y lo encontraba vació, no podía evitar pensar que era su culpa, que había arruinado lo que sea que tuviera con su roomie y ahora era incómodo.

Quizá lo que le mortificaba era la prioridad que le daba a la situación con Hyunjin que lo de Doyeon, sintiéndose mil veces peor por haber herido al chico que con no corresponder los sentimientos de su novia. Era extraño, pero Seungmin no pensaba mucho en ello, sólo sabía que era su culpa y debía arreglarlo ahora antes de que empeorara.

Los sentimientos positivos eran difíciles de desarrollar, pero los negativos germinaban con rapidez, consumiéndolo y reduciéndolo a un manojo de nervios y ansiedad que no dejaba de pensar en la misma cosa. En la última semana se encontró a sí mismo mirando la puerta de la habitación, esperando por Hyunjin, antes de quedarse dormido abrazando el perro de peluche que le había robado.

Jeongin dijo que estaba tomándoselo demasiado en serio, que quizá Hyunjin era realmente un amigo para él y por eso le hería toda aquella situación, pero Seungmin no podía estar en más desacuerdo con él. No conocía a Hyunjin, no sabía su color favorito, pero sabía que a Felix le gustaba el negro; no tenía ni idea de cuándo era su cumpleaños, pero sabía que el de Minho fue el 25 de octubre; no sabía qué baile le gustaba, pero era consciente que los Lee hacían ballet.

Conocía más a los amigos de Hyunjin que al propio Hyunjin.

¿A dónde quiero llegar con todo esto? Seungmin era malo expresando sus sentimientos, pero la música ayudaba.