127: Haunted.

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SURPRISEEEE porque hacerles llorar una vez no es suficiente, no pago terapia ._.

Esta cosa llego a 30k estrellitas, hace unos meses apenas había llegado a 12k, de dónde salio tanta gente?? Pero gracias por llegar hasta aquí

Hay una escena hyunmin que agregue por mero capricho mío, demandenme, así que equis, prosigan leyendo uwu

¿un pañuelito?

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"Tú y yo caminamos una frágil línea, lo he sabido todo este tiempo, pero nunca pensé que viviría para verla romper." -Taylor Swift.

...

Charlotte estaba revisando todas sus carpetas antes de irse a acostar. Necesitaba juntar todos los papeles de Minho para sacarles copias lo antes posible, y con eso también debía buscar la carta de defunción de sus padres y el acta donde ella acepta la tutoría total de ambos hermanos debido a que su abuela era muy grande para hacerse cargo de ellos.

Odiaba hacer la documentación; si bien el pasaporte de Minho estaba vigente por su reciente viaje a Rusia en navidad, necesitaban sacar otra renovación ya que se iría a estudiar a otro país, no simplemente como visitante. Claro, Minho ya era grande para hacer esas cosas solo, incluso ya había sacado cita para renovar su Visa y esas cosas, pero Charlotte, tan quisquillosa como siempre, tenía guardados todos sus papeles en un orden específico que le facilitaba encontrarlos.

O eso pensó hasta que no pudo encontrar el acta de su tutoría total.

Unos tímidos toques en la puerta la sacaron de su desesperación, alzando la cabeza para ver la cabellera rubia de Felix asomarse por una ranura, parpadeando con enormes ojos nerviosos. Charlotte parpadeó y miró la hora, asegurándose que aún era demasiado temprano para estar despiertos, sin embargo tenerlo ahí sólo le trajo recuerdos de su última charla realmente seria.

— ¿Terminaste con Changbin?—se atrevió a preguntar, preocupada.

— ¿Qué?—Felix se detuvo en el marco de la puerta, frunciendo el ceño—No, no que yo recuerde, ¿por qué?

—La última vez que viniste al estudio, me dijiste que estabas saliendo con él—aclaró la mujer pelinegra, quitándose las gafas que usaba para masajear el tabique de su nariz— ¿Ocurrió algo?

— ¿No puedo simplemente venir a ver cómo estás? Ya sabes, asegurarme que no te estés volviendo loca—Charlotte enarcó una ceja ante tales palabras, deteniendo a Felix en su vagabundeo antes de suspirar—Okay, bien, quería hablar contigo.

Charlotte sonrió débilmente, señalando la silla frente a ella dándole la bienvenida. Felix se apresuró a ocuparla, sus manos tirando del borde de la camiseta negra que usaba para dormir, tan enorme que Charlotte sólo temía que la estirara más si seguía jugando de esa manera con ella.

Sentía que se iba a vomitar, Felix estaba a nada de simplemente decirle que cambió de opinión y correr a encerrarse a su habitación, sin embargo sabía que eso no era correcto, tenía que enfrentar las cosas. Ya no era el niño que podía esconderse detrás de Minho cuando hacía algo mal, ya no se trataba sólo de escaparse en medio de la noche a comer ramen a escondidas, era su futuro.

Su hermano se iría el siguiente mes, Charlotte ya no debería sentirse presionada por la educación de otro de los chicos, ella ni siquiera había querido ser mamá antes de ese accidente. Sin embargo, se sentía peor al pensar que Felix era más hijo de ella de lo que fue para Mina y Sungjae, sencillamente porque para él no hubo nadie más.

Charlotte los quería a ambos como si fueran sus hijos, sabía que no había distinciones para ella, pero entre Minho y Felix si hubo un poco de margen; Minho amaba a Charlotte como su madre, la adoraba, pero Felix sentía que él nunca tuvo otra mamá, ahora ¿decepcionarla de esa manera? ¿Cuándo ha hecho tanto por ellos?

Musa.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora