Musa.

17: Monster.

Mendes Army reportándose ._.l

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"¿Y si me tropiezo? ¿Qué pasa si me caigo? ¿Entonces sería el monstruo? Sólo házmelo saber, por favor házmelo saber." -Shawn Mendes, Justin Bieber.

...

Las musas, leía Jisung con atención desde la pequeña pantalla de su celular, son las nueve hijas de Zeus y Mnemosine, una de las titánicas; éstas fueron engendradas, según el mito, en nueve noches consecutivas, lo que las hace nietas de Urano (el universo) y Gea (la tierra).

Un pequeño bufido lo sacó de su concentración, haciéndolo apartar la mirada de las pequeñas letras de su lectura para mirar a su compañero de estudio, sonriendo detrás de la mascarilla al notar a Lee Minho profundamente dormido sobre la mesa en el salón de estudio de la biblioteca, babeando la manga de su sudadera.

Jisung, cumpliendo su promesa, había conseguido un jugo de naranja y algo de comida para el mayor en un intento de aliviarle la resaca; en vista de que éste seguía una "dieta estricta", según sus palabras cuando Jisung sugirió conseguir café y pollo frito, se había conformado con el jugo de naranja, unas galletas de avena y paquetes de fruta seca.

No es que eso fuera a ayudar en gran medida, ciertamente no habría ayudado a Jisung, pero pareció ser suficiente para Minho, que se había comido casi todo y en seguida se acomodó sobre la mesa del salón de estudio quedándose dormido al instante. Jisung ni siquiera había notado cuando se había quedado dormido ya que había estado balbuceando respuestas a las preguntas del más joven hasta que sólo dejó de hacerlo y lo único que soltó fue un débil suspiro.

El peli-azul imitó la posición del mayor, cruzando los brazos sobre la mesa y acomodando la mejilla sobre ellos, mirando el rostro dormido con él, sintiendo que su estómago se revolvía por la imagen y sus ojos brillaban en apreciación de la belleza que poseía Minho; ahí dormido sólo lucía más irreal, como un tipo de estatua tallada en mármol en el descanso eterno, con largas pestañas que proyectaban sombras en sus pómulos y leves ojeras bajo los ojos. Incluso tenía un lunar en la nariz que Jisung no había notado antes.

La primera vez que vio a Minho fue en una presentación durante su primer año; había sido obligatoria la asistencia para una de sus clases de introducción, alegando que obtendría puntos extras si iba, así que Jisung arrastró a Changbin a esa presentación para tener algo de compañía, aún sintiéndose intimidado por la vida universitaria.

Fue como si alguna estatua de Miguel Ángel hubiera cobrado vida, danzando en el escenario con fluidos movimientos que cautivaban a cualquiera, volviendo borroso su alrededor, provocando que con cada giro que daba el bailarín, Jisung se sintiera en una centrífuga.

Decir que era el amor de su vida no parecía tan loco en ese momento, especialmente cuando Minho hizo una reverencia al final y sus ojos se encontraron con los de Jisung entre la multitud, sonriendo de manera ladeada, recibiendo la oleada de aplausos con un brillo en sus ojos que dejaba sin aliento al mundo, haciéndolo lucir aún más etéreo.

Después su enamoramiento empeoró, queriendo ver a Minho siempre ya que, según Jisung, había sido amor a primera vista; buscando una forma de acercarse a él para conversar, viéndose frustrado al no conseguir ni siquiera una clase de introducción con él por no ser de la misma carrera y, desgraciadamente, del mismo curso. Volviéndose casi desesperado, lloriqueando y suspirando por él, diciéndole a Chan y Conan que no podrían casarse si no hablaban.

Duró así todo primer año sin éxito alguno; durante el verano planeó una estrategia para acercarse a Lee Minho, ignorando lo que el mundo decía de él y su hermano, y así poder casarse con él y declararle que era el amor de su vida, pero después de empezar segundo tuvo la...lo llamarían recaída, donde duró cinco meses sin salir del apartamento, donde apenas se bañaba y cambiaba de ropa, donde no comía bien y se ponía terrible ante la idea de salir.