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Emma.

Suspiré y salgo del baño con mi vestido rojo escotado en la parte de mis senos, el vestido me quedaba un poco más arriba de la rodillas camine a la cama envolviendo mi cabello.

Me senté en la cama y tome mis sandalias color blanca de tacón fino con algunas perlas.

— Hoy es un nuevo día, hoy soy una nueva Emma — me aliente a mi misma para caminar  a la peinadora y quitarme la toalla para tirarla al cesto de ropa sucia — Ni siquiera yo me creo eso, se que si Dominic me coquetea caeré en sus brazos o mejor dicho en su cama teniendo sexo, ufff y con ese cuerpo quién no, ¿La razón? Porque estoy enamorada de él, ¿Quién lo diría? Yo Emma hablando así de mi misma jamás me había pasado algo así, pero para eso siempre hay una primera vez para todo — seguí hablando mientras me miraba en el espejo — Quien me viera se asustaría estoy hablando sola como una demente — me reí por lo que había dicho.

Tome el cepillo después de haber desenredado mi cabello para tomar la secadora.

— ¿Hablando sola? — me sobresalté en mi lugar cuando escuché la voz de mi madre.

Mire a mi madre en el espejo y estaba apoyada en el marco de la puerta mientras se tapaba la boca riéndose. ¡Que vergüenza!.

— ¡Mamá! — exclamé y ella entró completamente a mi habitación vestida de unos jeans color negro ajustado a su cuerpo junto con una camisa blanca escotada mostrando sus pechos junto con sus sandalias altas — ¿Cuánto tiempo llevas allí?, ¿No irás al hospital? ¿Por qué estás vestida así? — pregunté.

— Basta de pregunta señorita preguntona — bufo haciendo que me quejara — No iré al hospital ya que me dieron vacaciones e iré con tu padre a desayunar ya que el me invitó.

— Por fin mi padre te llevará a desayunar — abogue cuando mi padre paso por el lado de ella ajustándose la corbata.

— Oye — se quejó y abrazo a mi madre por detrás — Siempre que quiero invitar a tu madre a salir la llaman en el hospital.

Eso era verdad mi madre no tenía ningún tiempo libre.

— Está bien, se que tengo a mi familia abandonada pero deben de entender — asentimos y mi padre se fue dejándonos sola.

— Mamá yo en verdad no quiero verlo — suspiré y me gire a mirarla ella río — ¿De qué te ríes no es gracioso?.

— Si que lo es — ella cerró la puerta de mi habitación y camino hacia mi haciendo que me diera la vuelta y tomara el cepillo para luego cepillar mi cabello como cuando yo era una niña — Deja de preocuparte, deja de estresarte, vas haber que arreglaran eso, además no sé de qué te preocupas has pasado cosas más graves y te preocupas por algo pasajero — dejó el cepillo en la peinadora para hacerme una trenza francesa.

Lo que dice mi madre es verdad he enfrentado peores cosas y me preocupo por algo que se que se solucionará.

Aunque algunas veces dicen que tienes que olvidar lo que sientes y recordar lo que mereces. Y lo que necesito es tener un solo día sin ver a Dominic olvidarme de él y tener un suspiro para mí.

Recuerdo que cuando no me había acostado con Dominic y me acostaba con algunos empleados después de tener sexo ellos querían invitarme a salir pero yo no tenía tiempo para andar haciendo eso sólo pensaba en mi y no en los demás, discutía con ellos porque me querían para formar una relación pero para mí eso era un compromiso que no quería asumir o mejor dicho huía del compromiso pero ahora estoy en una relación.

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Entró a la empresa aparco mi auto en el estacionamiento apretó el volante.

Ahora estoy aquí en la empresa a un paso de verlo.

Te Quiero Para Mí (+18) [SAP#2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora