HISTORIAS Y SUEÑOS

14 3 0
                                    

Amar y pensar
Cuidar y soñar
Palabras que no suenan igual
Pero conectadas siempre han de estar
Cuida lo que amas
Piensa en lo que sueñas
Cree que aunque duela
Se consigue lo que esperas.

-¿Te diviertes?- preguntó la chica mientras batía unas cucharadas de chocolate en polvo y agua en un bowl de madera.

-¡Si!- respondió el pequeño mirando atento como su hermana hacía que el chocolate se volviera esponjoso.

-Eres muy buena con esto- admiraba la pequeña desde muy cerca también.

-Es en realidad casi lo único que puedo hacer bien en la cocina- rió Sofía contagiando a los dos pequeños.

Había iniciado la pijamada que tenían programada, la mayor había enviado muchos mensajes a sus amigos, pero no contestaba ninguno, asumió finalmente que estaban demasiado ocupados o descansando por fin y decidió no molestar. Le encantaban los niños, se impresionan con facilidad y tienen una capacidad increíble de aprendizaje, se divertía mucho con ellos, esa noche habían cantado, jugado y leído historias entre los libros de Máximo, ahora Sofía les mostraba a los pequeños como hacer un chocolate con leche para que quedara encima una espuma deliciosa de chocolate dulce.

-Ya está- dijo y quitó el batidor de mano del bowl dejando ver una brillante espuma café- vamos, pruébenlo, está delicioso.

Los niños probaron ansiosos el dulce y les brillaron los ojos al ponerlo en su boca, se levantaron corriendo a buscar los vasos que estaban en una mesita, llevaban tres, Sofía puso generosamente en cada uno de los vasos algo de chocolate para luego rellenarlo de leche tibia, finalmente decoró arriba con más chocolate en polvo y les puso unas bombillas.

-Veamos cómo quedó- dijo acercando la bombilla a sus labios hasta que sonó su teléfono.

-Holi Sofi, perdón por no contestar antes, los abuelos del gringo son gente de temer- era un mensaje de Melisa, le escribía desde Bruselas en Bélgica.

-Es la Meli- contestó sonriendo y escribió- "no seas llorona, no puede ser tan terrible una pareja de ancianitos"

-Créeme, la próxima vez creo que voy a tener que presentarme tipo "Hola, soy Melisa, y no soy su maldita pareja".

La castaña rió, siempre aparecía alguien diciendo que esos dos parecían pareja, para ella y sus amigos ya era un chiste repetido pero no dejaba de ser gracioso, sobre todo sus reacciones.

-"No me lo robes eh?"- le comentó burlesca- "por cierto ¿Ya saben cuando vamos a hacer la llamada grupal?"

-En realidad Sofi, los computadores de los chiquillos están con problemas, no sabemos bien que pasó y ni podemos contactarlos, me sorprendió ver que me hubieran llegado tus mensajes, he intentado toda la tarde hablar con el Elías pero no me responde.

-"Que extraño- le respondió preocupada- ni siquiera puede ser por la zona horaria si Roma y Bruselas tienen la misma hora"

-Si, es raro, pero no hay nada que hacer, recuérdame estarte hablando, se me suele olvidar que puedo hablar con las personas jaja.

Sofía sonrió y volvió su concentración a los niños otra vez.

-¿Quieren que les lea otra historia mientras tomamos la leche?

-¡Si!- respondieron al unísono y Lila se levantó corriendo a apretar la radio que había a los pies de la cama del chico y empezó a sonar una agradable música ambiental, lluvia, viento, violines, arpas, eran sonidos que el pequeño no podía escuchar con frecuencia si no eran grabados.

Lila se Acostó en su saco de dormir con forma de oruga y Máximo en su cama, le había pasado almohadas a la pequeña para que pudiera estar más cómoda.

-Sofi... ¿Puedes leer la historia de Simon?- la mayor se congeló frente al mueble con los libros.

-¿Hablas del de la guerra del cielo?- preguntó intentando componerse.

-¡Si!- contestó animado- me gusta mucho pero no he podido leerlo completo, es muy largo para mi... Bella me lo ha ido leyendo cada día que viene, es muy interesante aunque da algo de miedo...

-Pe... Pero Maxi, la Lila no ha leído lo que tú has avanzado de ese libro, tengo que leerles algo que les interese a los dos...- no quería leer ese libro, si bien era verdad que la pequeña no lo conocía, eran más excusas que otra cosa- puedo leer una de las leyendas que hay en él si quieres.

-Me gusta la magia- respondió el pequeño un poco triste.

-A mí también- apoyó Lila- me gustan mucho las hadas.

-Precisamente en este libro hay una historia de las hadas, y también hay de sirenas... Aunque no de las sirenas que piensan- rió un poco recordando su propia sorpresa por las "sirenas".

Se sentó entre los dos también en su propio saco de dormir, había sacado unas colchonetas para ambas y abrió el libro al final donde salía la página exacta en que aparecía cada historia ajena a la principal.

-"Las estrellas, inalcanzables decorados del cielo, cuentan los antiguos que no son solo masas de luz fulgurante, son hadas que vigilan los sueños de quien vive en la tierra...- la historia continuó y continuó, ciertamente no quería leer ese libro, lo amaba demasiado. Los niños se durmieron, ya eran cerca de las dos de la mañana-entonces la reina Ámbar se elevó hasta la luna para mantener los sueños atados a la noche. Desde entonces, cuando veas una estrella fugaz le pedirás un deseo, para que la persona que cumplió su sueño vuelva a tener otro y su hada no apague su brillo". Ok- dijo finalmente- tengo que dormir. Éteindere- ordenó a las luces y estas se apagaron.

Sueños de niño
Pasos de historias
Héroes invictos
Hadas voladoras
Siempre se esperan
Los roles cumplir
Cuida las historias
Son cumplidas por soñadoras.

MaiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora