Maia

Ruptura (41)

Es tan fragil

fragil confianza sutil

tan fragil al venir

tan fragil al partir

como bello cristal marfíl

tenerla no es facil.

Muchas cosas la confianza puede permitir

pero siempre es un dar y recibir

perderla puede hacerte inutil

por lo mismo volver una relación estéril.

Corazón herido intenta seguir

corazón herido olvida lo vil

corazón herido no te dejes morir

hay quien por tí es gentíl

pero tienes que seguir.

Despertó sintiendo la cara extraña, tensa, no podía creer lo que su memoria le contaba cuando notó que tenía el cuello algo adolorido, se miró en el espejo, se veía tal cual como si se hubiera revolcado en pasto por tres horas, estaba enojada, muy enojada... no, una lágrima rodó por su morena mejilla al notarlo, el enojo solo encubría el dolor que estaba sintiendo, estaba triste, se sentía traicionada, la había golpeado, no jugando como siempre bromeaban, la noqueó de un golpe serio, con total intención de hacerlo... nunca lo habría esperado, nunca subió su guardia con él...

Necesitaba hablar con Mateo, era al único al que sentía que realmente podía contarle algo, podía ser demasiado mala para hablar pero él le había hecho prometer que no iba a dejar secretos entre ambos, no si estos les hicieran daño como lo que estaba pasando ahora; eran al rededor de las 9 de la mañana así que supuso que debía estar despierto, le envió un mensaje intentando ver si tenía tiempo para esto, era corto, simplemente "estás ocupado?", dudó en enviarlo un momento, él estaba bastante ocupado cuidando a Sofi que prefería no estar sola pues el dolor de la perdida del pequeño Maxi aún se hacía presente sobretodo cuando estaba sola... obviamente eso era más importante que su estupido sentimiento de ruptura, claramente un problema amoroso suyo no iba a ser tan importante como su propia novia y eso estaba perfecto, esa es la jerarquía de relaciones que siempre había aplaudido.

-¡Deja de decir que no es importante lo que sientes!- dijo un recuerdo de Mateo en su cabeza llevando a cabo su primera pelea violenta.

-No es importante- respondió esa Mel con el cabello más largo y casi más liso- puedo resolverlo sin preocupar a nadie ¡ya basta!...

-¡Pero nos tienes aquí!... me tienes aquí- contrarrestó deteniendo la pelea- no tienes por qué hacerlo sola...

Tomó valor y envió el mensaje mientras sabía que si estaba ocupado simplemente no diría nada, le gustaba respetar el espacio de las personas y evitar molestarlas. Se abrazó las rodillas dejandose caer a los pies de su cama intentando no pensar en nada, parecía que sus pensamientos, recuerdos e ideas hacían eco en su cabeza como si fuera a estallar si no los sacaba así que hizo lo que solía hacer cuando su propia voz no era capaz de decir nada, tomó sus cosas, un cuaderno y un lápiz intentando dibujar algo, cualquier cosa, lo que fuera que saliera de la nada sin planificación ni pensar demasiado, lo que menos quería era seguir pensando, que todo simplemente se volcara en la hoja, un dibujo borrado, dos, tres, cuatro, arrancó la hoja cuando notó que las lágrimas comenzaron a manchar la hoja, ahora también iban llenas de frustración e impotencia, no salía nada, no podía dibujar, con furia lanzó su cuaderno tan fuerte que un par de hojas sueltas salieron volando dejando a la vista pequeños dibujos sin demasiada pulcridad, los miró aún triste, dibujos romanticos... justo ahora... se deseo la muerte en silencio todo lo que pudo culpandose sobre todo, todo lo malo que ocurría, todo lo malo que iba a ocurrir, culpandose de haber escogido lo que no debió escoger, recordó lo que le había dicho a Sofía un par de meses atrás.

"-Cariño, yo no solo confío en él, también confío en mí, en mi elección y en mis decisiones, dudar de tu pareja es solo causado por la baja autoestima y sentir constantemente que te va a cambiar por algo mejor, realmente, no hay nada mas eficiente para destruir una relación que eso..."

-"Confiar en mi elección"- dijo para si- pedazo de mierda se me ocurrió hacer- clavó sus uñas en sus rodillas desnudas rasgando levemente su piel- por la cresta... me quiero morir... no quiero estar aquí... no quiero estar en ninguna parte... solo quiero... desaparecer...

Sería tan fácil simplemente desaparecer, dejar el lugar, no hacer nada, no ver nada, no oír nada, no deberle nada a nadie, sus libros la solían llevar a mundos mágicos donde los protagonistas nunca se carcomían la cabeza con los crueles pensamientos estúpidos que la inundaban en todo momento...  "¿crueles" preguntó su cabeza "¿qué tiene de cruel tratarte como te mereces? todo lo que te pasa es tu culpa, es bueno que ocurra, ojalá así al menos mejores la mierda de persona que eres, mejorar o desaparecer, no es tan dificil la segunda opción, sabes perfectamente como acabarte..."

La vibración de su teléfono la hizo dejar de torturar sus piernas y de poner atención a lo que sus pensamientos decían para dirigirse a ver el mensaje, se sintió aliviada, era Mateo, por un momento creyó que iba a poder hablar con él, pero al desbloquear el aparato pudo leer el mensaje y abandonar la poca esperanza que le había quedado.

"-Si, lo siento, recién salimos con la Sofi del hospital, tuvimos que traer a un tipo que casi muere intoxicado con una cosa rara, ibamos a dormir ahora para recuperar las horas de sueño que perdimos"

"-Bueno- respondió la morena- que descansen" 

Tras enviar el mensaje disparó el teléfono contra sus almohadas, lo sintió vibrar nuevamente pero no le dio importancia, ni siquiera tenía sueño, estaba en blanco, no sabía como se tenía que sentir, solo sabía que lo que había pasado no estaba bien, y no pensaba volver a bajar la guardia con nadie, nadie nunca más iba a verla romperse como él lo había hecho, nunca más frágil y vulnerable, no pensaba darle a ninguno la facilidad de acercarse lo suficiente como para algo así, estaba claro que solo se tenía a si misma y si tenía que volverse aún más horrible y maldita con el resto iba a hacerlo sin preocuparse por nadie más... solo se tenía a si misma.

-¿Qué ves?- preguntó Sofía curiosa al canela.

-La negra me mandó un mensaje pero... no responde al resto- respondió confundido- preguntó si estaba ocupado y le dije que si, le conté lo del hospital y que habíamos salido recién, ahora le estoy preguntando si está bien pero no ha respondido...

-Si no fue agresiva con sus respuestas entonces está bien, tranquilo- intentó calmarlo la menor acariciandole el brazo- no deberías preocuparte de mas, no hemos dormido bien así que estamos agotados como para esto, por eso crees que está mal.

-Supongo- intentó convencerse el canela mirando aún el teléfono y envió un mensaje de voz- "manda audios para que hablemos más rápido"- parecía un comentario común y corriente, pero era una forma de saber si estaba bien, la única forma que se le ocurría en ese momento ya que podría escucharla.

-Si aún te preocupa ve con ella- dijo la chica sonriendo, él la miró, con el cabello desordenado y las ojeras marcadas bajo sus ojos, parecía haber perdido peso en el ultimo tiempo- aunque creo que yo la conozco mejor- comentó manteniendo su sonrisa haciendo dudar al canela.

-No... ella estará bien- le acarició la cabeza- es ella después de todo.

-Tienes razón, es muy fuerte- añadió correspondiendo su caricia- me gustaría no ser tan dependiente, ya sabes, ser más como ella y poder... sobrevivir sola.

-Eso es lo que me preocupa precisamente- sumó el más alto casi inaudiblemente para continuar su camino de la mano de su enamorada intentando alejar a los pensamientos intrusivos suponiendo que solo estaba cansado.