Andrés (29)

22 3 0
                                    

Las conexiones complejas son

menos complejas que los asuntos del corazón

estos abundan en todo rincón

y las dudas entran hasta por un agujero de ratón.


Dudas de todo tu alrededor

confía en lo que con el tiempo te hizo de observador

no tomes de sobra lo que te piden de dos

cuida con tus oídos lo que podría ser ensordecedor.


Vigilan quizás tu ordenador

atentos sentidos podrían tener razón

palabras de sobra en una oración

forman la respuesta que busca el buscador.


Usa la razón para armar el acertijo

con un acertijo debe ser la contestación

cuidado de lo que comprende el corazón

las experiencias muestran más que la emoción.



-¿Estás seguro de que esto va así?- preguntó Elías mientras Andrés le entregaba unos códigos que hacía unos minutos había escrito en un papel.

-Si no quieres perder ni tu teléfono ni tu pc, pruebalo, veamos si este si funciona- respondió ya bastante molesto por la situación en que se encontraban.

Llevaban días tratando de arreglar el problema que les botó los servidores, cada vez que parecían conseguir algo se encontraban con un encriptado diferente que no los dejaba continuar con lo mismo, así que ambos se estaban quedando ya a los limites de su paciencia. Elías se volteó hacia su computador y comenzó a teclear el codigo desde el programa especial que tenía abierto mientras pensaba en como llegó hasta allá, todo partió con una simple junta entre amigos para definir algunas cosas y se tragaron un virus que les echó abajo las comunicaciones, nadie sabía lo que ocurría con nadie, así que viajó hasta Colombia ese mismo día para poder resolver con Andrés lo que pasaba, eran los que más se manejaban en computación aunque el moreno le llevara una clara ventaja. 

-Ya está- respondió levantandose de su silla- tercer código que probamos esta mañana, voy a comprar algo para desayunar mientras termina de comprobarlo ¿quieres algo?- el más bajo solo movió la cabeza de lado a lado sin despegar los ojos de la pantalla- muy bien, avisame cuando quedes ciego por si quieres uno de mis croissant o de mi café- bromeó para relajar el ambiente y salió.

-¿Esos no son franceses?- dijo para sí el moreno riendo un poco y aún mirando los numeros que rápidamente viajaban hacia arriba de la pantalla.

Resonaba en su cabeza unas palabras que Matías le dijo una vez en que fue a intentar preguntarle por Sofía antes de notar los problemas de violencia.

MaiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora