❦𝐷𝑜𝑘𝑎𝑙𝑙𝑖❦ KookV

Capítulo Catorce

El día era soleado y hermoso, ese tipo de días le gustaban a Taehyung, siempre le daban una buena vibra, aunque podría incluso estar nublado y a punto de llover (Porque odiaba que lloviera), pero aun así seguiría siendo un buen día. Sin embargo, para alguien como él que su temperamento era muy voluble este hecho es raro, los días que trabajaba con el clima que odiaba eran un infierno para sus trabajadores, se ponía demasiado mandón y exigente, en pocas palabras malhumorado, por el contrario, ahora sentía que podía disfrutar un día así. Con Jungkook.

—¿Ya estas listo Tae? —El Alfa se cruzó de brazos y se recargo en el marco de la puerta para verlo.

—Listo —Con una sonrisa se acercó a su Alfa para depositar un suave besito en sus labios y tomar su mano— Si nos da tiempo quizá podamos ir a turistear por ahí.

—Claro, cuando fuimos antes, te enojaste y no pudimos ir a explorar mucho.

—Me dijiste prácticamente que no era tu tipo de omega, mi lobo se sintió mal por eso —Dijo a la defensiva— ¿Cómo querías que lo tomara?

—Yo no dije eso, solo dije que descubrí algo tuyo —La voz de Jungkook salió tranquila, como si nada hubiera pasado.

—¿Entonces soy tu tipo?

El Alfa pareció pensárselo para al final soltar con calma—Eres mío.

—¿Eso que significa?

—Qué mi tipo de omega eres tú, tan sencillo como eso.

Sonrió complacido y cuando estuvieron afuera dejó un casto beso en la mejilla de Jungkook.

—¿gritón y mandón?

—Si, también hermoso e infantil.

(...)

Habían terminado de hacer todas las compras, incluso llevaban un producto del que ambos estaban más que conscientes, rascándose fuera la ansiedad por regresar a la casa comenzó a caminar con el Alfa. Sabía que Jungkook era alguien que gustaba de conocer los lugares, por eso había sugerido que dieran un paseo.

—Oye Kook, me lo he preguntado mucho y ¿Por qué no seguiste estudiando? —Soltó de manera casual mientras intentaba mirar hacia otro lado, su mano estaba entrelazada con la de Alfa y eso solo lo hizo consciente de cómo su cuerpo se tensó.

Por un momento se arrepintió de arruinar su atmósfera de comodidad, pero es que la curiosidad lo comía vivo, quería saber más de la vida del Alfa. Aunque no pensó que eso lo fuera a tensar tanto, parecía un tema delicado para él.

—Escucha yo...

—No contestes si no quieres hacerlo.

—Supongo que puedo decirte —Jungkook agarró con más fuerza su mano y agachó la cabeza un poco— Mi papá y mi mamá no eran destinados, pero se sintieron tan atraídos por sus aromas así que supongo que decidieron intentar estar en una relación, de toda esa mierda nací yo, después como a los cinco años de mi nacimiento, mi papá encontró a su pareja destinada ¿Qué crees que paso?

—¿Se fue?

—Sin pensarlo lo hizo, nos dejó y fue tras su felicidad, mamá obviamente se deprimió, él se fue y nos dejó en la miseria, para poder sobrevivir mi mamá comenzó a trabajar, pero su sueldo no era suficiente para cubrir las cuentas de la casa y aparte las nuestras, como Alfa, yo debía de ayudar así que comencé a trabajar cuando tenía siete años, ayudaba a una vieja beta a vender gachas de avena, lo demás fue difícil porque veía todas las noches como mamá lloraba por no tener que comer, así que hice mi esfuerzo, de hecho durante todos esos años lo hice.