Crazy Babies (En edición)

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─Ensucian las camas y juro que no amanecen vivos ─Mark amenazó en cuanto los chicos entraron a la habitación, uno por uno.

Primero Hyunjin y Jeongin tomados de las manos, ellos no eran un gran problema, lo más probable es que pasarían toda la noche acurrucados, besándose o bebiendo, al igual que Changbin y Felix. Después le siguieron Donghyuck, Park Jisung, Jaemin y Jeno, y allí es donde comenzaba el dilema. No quería acusar a su novio de ser un desastre cuando bebía... pero eso es justo lo que estaba haciendo, porque siempre que se juntaba con el resto era mil veces peor. Sin embargo, los más problemáticos estaban acostados en la cama de su hermano.

─Jisung y Chenle, saben bien que les estoy hablando a ustedes.

Han Jisung eleva los hombros.

─Ya la ensucie, llegas un poco tarde.

Mark respondió con una mueca de asco, comprendiendo más rápido de lo que hubiese deseado. Minho rió desde un rincón de la habitación y se hizo el desentendido, repartiendo los típicos vasos rojos de plástico para cada uno. No tenía ni la menor idea de dónde los había sacado.

─No los vayan a perder, porque no tengo más. ¡Les advertí!

El ambiente era tranquilo, no podían hacer mucho ruido o correrían el riesgo de que los descubriesen y tendría que ir despidiéndose del internado. Creyeron que llegaría el momento en que podrían aburrise por las limitaciones, sin embargo, el constante peligro lo hacía más emocionante. No es lo mismo que estar en la casa de alguno, escuchando música fuerte, bebiendo, haciendo escándalo en plena madrugada, porque allí existía la libertad y el mayor miedo era que alguno de sus padres se diera cuenta que andaban divirtiéndose irresponsablemente. En el internado tienen ojos en todas partes, en las habitaciones de los lados, al frente y los inspectores de pasillo que van verificando que todos estén en la cama, un solo descuido y les iría mal a todos. Eso es lo divertido.

Aquella se iba a sumar a las mejores experiencias que han tenido como grupo.

─¿En serio nunca se dieron cuenta? ─Felix estaba riendo con sus mejillas rojizas, señal de que se le había subido el trago a la cabeza─. Jeno bebe alcohol como dos o tres veces al año, ni más ni menos.

Han Jisung y Chenle se miraron entre ellos, incluso Hyunjin intentaba hacer memoria, pero tal parece que era cierto.

─¿Y el año pasado cuando te invité a beber? ─le preguntó Mark a Jeno.

─¿Cuándo andabas depresivo por Hyuck? Bebiste tú, no yo.

Mark ocultó el rostro entre sus manos, pero de todas maneras fue visible la obvia vergüenza y el sonrojo que subió hasta sus orejas. El resto comenzó a molestarlo con ruidos, suaves empujones de hombro y chistes sin sentido, incluso Donghyuck se acercó a besar sus calientes mejillas.

─Yo sí recuerdo eso... ─aportó Hyunjin, es como si hubiese sucedido ayer pensó, pero de inmediato su rostro cambió por completo y creyó que era buen momento para dramatizar─. Y si estabas sobrio, ¡¿Por qué no lo llevaste tú a casa?!

Jeno le dio un sorbo al amargo whisky en el vaso de plástico. ─¿Quién es su mejor amigo?

─¡Eso no justifica nada!

─De todas maneras, Mark te pidió a ti que lo fueras a buscar. Yo no me iba a hacer de rogar ─instintivamente acarició la rodilla de Jaemin, quien se encontraba a su lado viendo como discutían, ambos sentados en la cama de Mark, mientras que el resto estaba en el suelo, en la cama de Minho o en los respectivos escritorios─. Andaba en sus días tristes, debes comprenderlo.

Mark se quejó. ─¡Ya basta! Me están dejando mal a mí...

─¡¿Sabes cómo vomita Mark cuando está borracho?! ─Hyunjin respondió una vez más, cruzándose de brazos, al igual que un niño haciendo berrinche─. ¡No pude dormir porque creí que se iba a ahogar!