|| ꜱᴡᴇᴇᴛ, ʙᴜʀɴɪɴɢ ᴀɴᴅ ʙɪᴛᴛᴇʀ ||

28. Ahorrar

[Yunando corto]

Aquella tarde Yun entro a su despacho con una tan poco creíble máscara de tranquilidad que desde antes de que abriera los labios intuyó que nada bueno iba a decir. No le presionó para hablar ni pregunto nada cuando en silencio empezó a moverse de un lado a otro con su linterna entre las manos, ni cuando estuvo a punto de dirigir sus pasos a la salida, pues pese a que la molesta duda comenzaba a carcomerlo, sabía que de hablar antes que él corría el riesgo de ponerlo nervioso y que las probabilidades de enterarse fueran escasas.

—Almando — Le llamó al fin, avanzando tan sólo un poco en dirección a su escritorio. Desvío su vista del computador, pues tampoco quería mirarlo demasiado, y emitió un suave ruido desde el fondo de su garganta, indicándole que lo estaba escuchando—, te tengo una buena y una mala noticia.

No era la primera vez que debía escoger entre dos opciones, pero a diferencia de antes ahora sabía que con él las buenas noticias no existían, sólo le contaba cosas que había hecho bien ese día para minimizar su enfado. Se recargo desganado contra el respaldo de su silla mientras liberaba un ruidoso y cansado suspiro, y luego de llevar sus dedos al puente de su nariz se atrevió a preguntar.

—Venga, dime, ¿cuál es la mala? — preguntó con los ojos aún cerrados, rogando por paciencia con cada minuto que su pareja se tardaba en responder.

—Cleo que he peldido otla ve' al niño — informó entre temeroso y avergonzado, omitiendo el detalle de Tonet era quien estaba a cargo del pequeño mientras él hablaba con una amiga por el bien de su compañero y el suyo.

—Joder — maldijo entre dientes a la par que abría los ojos, conteniendo momentáneamente las ganas de darle un golpe en la cabeza con la llave por tonto y descuidado—, ¿y la buena, lo han encontrado ya?

—No...— murmuró antes de añadir con una sonrisa nerviosa— pelo al meno' ya no tendlemos que gasta' en colegiatura.