|| ꜱᴡᴇᴇᴛ, ʙᴜʀɴɪɴɢ ᴀɴᴅ ʙɪᴛᴛᴇʀ ||

40. Headcanons

[Volkabo]

1. Gustabo esta constantemente pidiéndole matrimonio a Volkov, aún sabiendo que lo más probable es que lo rechace. De hecho no le importa nada, es como que sólo suelta la propuesta al aire a ver si un día le resulta.

2. Los dos son demisexuales, por lo que tuvieron un vínculo emocional fuerte, estable y de cierta duración antes de poder sentir atracción sexual hacía el otro.

3. Volkov tiene un tatuaje en la espalda baja que no le ha mostrado a nadie más que a Gustabo ya que se lo hizo en su etapa rebelde. No importa el universo en el que se encuentren, la relación que tengan o el modo en que terminen, siempre acaba siendo él.

4. Gustabo tiene una pequeña coleta sólo porque Volkov, luego de varias copas de vodka, le dijo que se le vería muy bien. Obviamente lo olvido en la mañana.

5. Sus relaciones siempre son largas, duras y muy ruidosas. Son los que más fetiches tienen y los que más marcas se dejan en el cuerpo, pero no suelen hacerlo en lugares donde puedan ser descubiertos por el pudor de Volkov.

6. No usan apodos cariñosos, nunca.

7. Ambos dicen fechas distintas cuando alguien les preguntan desde cuando son pareja, esto por gracia de Volkov, quien por su nacionalidad había asumido que estaban saliendo desde que le regaló una rosa y no planeaba preguntar. A Gustabo no le agradó la idea, menos aún después de recibir un beso que le dejo estático, así que lo obligo a proponerse de la forma más pomposa posible.

8. No pueden ver una serie o película sin terminar discutiendo por el fuerte choque de sus puntos de vista.

9. Ambos son celosos, pero Volkov es el que menos lo demuestra estando en público y Gustabo el que empieza a marcar territorio o a tirar comentarios mordades al notar una posible amenaza.

10. Gustabo iba a visitarlo cuando estaba en coma, pero sólo lo hacía cuando no existía el riesgo de que alguien lo viera y eran máximo quince minutos. Tomaba su mano, se disculpaba más de diez veces, y ahogaba sollozos mientras le pedía que despertará. Volkov nunca se enteró de ello.