A 1,000 yardas de tu corazón.

Epílogo.

15 años después....

Era un día soleado en San Francisco, el campo estaba iluminado y el cielo se despejaba lentamente conforme las nubes cambiaban de rumbo alejándose.

Jailene, Chase, Julissa, Lola, Justin y Adolf, se encontraban sentados en las gradas bajo la sombra de un enorme árbol. Alex se encontraba trabajando en Francia.

—Demian y Edward lanzan el balón igual que tú, Chase— Comentó Justin, observando a su sobrino.

—Estuvimos lanzando muchos pases durante el verano— Respondió Chase.

—Rompieron cuatro jarrones en la sala. — Dijo Jailene.

—¿Y qué les hiciste?— Preguntó Lola, riendo.

—Los regañé por lanzar pases sin mí.

—¿En dónde está Jess? —Preguntó Julissa, la hija menor de Jailene y Chase, a Adolf.

—Se quedó en casa con su madre, pequeña. Olivia tuvo mucho trabajo ayer y estaba cansada. Por eso sólo vine con Marcus.

—Charlie y Bruno corren como tú, Justin —Comentó Chase.

—Sí, también tuvieron tiempo de practicar bastante. — Rio.

—¿Salían a correr seguido?

—No. Rompieron el adorno favorito de su madre.

El aire era fresco, y traía consigo al aroma del césped. Al cabo de pocos minutos escucharon el silbato del entrenador, indicando fin al entrenamiento.

Los chicos corrieron con sus padres.

—Mamá, ¿viste eso?— Demian estaba emocionado—. Logré lanzar un pase de 70 yardas.

—Lo vi — Sonrió —. Tú y tu hermano lo hicieron muy bien.

Charlie y Bruno bebían agua, estaban cansados y su respiración era agitada.

—Estaba a punto de cansarme, pero seguí tú consejo, papá — Dijo Charlie a Justin —, imaginé que mamá me perseguía, y seguí adelante.

—¿Tú le dijiste eso? — Lola le dio un codazo.

—Necesitaban un incentivo, cariño— Rio.

Luego de unos minutos de descanso, y de charlar con el entrenador, todos se pusieron de pie para marcharse.

—Los espero mañana— Sonrió Gibsley.

Chase subió a Julissa sobre sus hombros mientras comenzaban a alejarse.

Dieron un último vistazo hacia atrás y una última gran sonrisa al entrenador.

Él sólo los miró irse. Por un momento, estuvo seguro de ver a aquellos chicos de 17 años a los que había entrenado durante mucho tiempo.

Sonrió. 

••••••×.
La vdd, estoy llorando en este momento alskskaka. No hay lectores, y los pocos que hay seguramente dirán "Ay por favor Julián somos 3, ni al caso" con mi discurso pero anyways.

Hace un año empecé a escribir esto, y en ese momento, realmente creía imposible poder terminarla. Es muy significativo para mí el haber terminado por fin, y poder compartir mi historia con el mundo. No sé si llegue a ser una historia con reconocimiento o no, pero lo más importante para mí, es que pude compartir con ustedes (aunque sean pocos) los escenarios que se hacían siempre en mi cabeza, o mis ideas cursis. Aprecio mucho que se dieran la oportunidad de leerme.

Espero que la hayan disfrutado, así como yo disfruté escribirla.

Gracias. ♥️

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