• CAZANDO A KITTY GARCÍA • Historia Original

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Luego de esa incómoda charla con Little Prince, Agust decidió alejarse y chequear el local desde un rincón. Así, pasó una hora —una muy aburrida, por cierto—. Las parejas seguían bailando en descontrol al ritmo del DJ. También, algunos Alfas y Betas recurrían a las prostitutas de Kitty. Todo apestaba a alcohol, droga y sudor, una terrible combinación.

—Un gusto hacer tratos con usted —dijo una voz dulce y delicada, aunque seductora. Era Kitty quien hablaba a lo lejos.

—Siempre es un placer contigo —contestó su acompañante—. Ya sabes, te esperamos el próximo viernes en nuestro lugar. Mi Omega se encargó de arreglar cada detalle.

—Estaré ahí sin falta. —Sonrió.

—Nos vemos. —Besó su mano para después irse con Little Prince.

Agust aprovechó el momento para acercarse a la que creía su Omega. Sin embargo, cuando estuvo a punto de preguntarle sobre su reciente conversación, ella lo interrumpió con frialdad.

—Tengo que irme. Gucci me espera en el Mercedes. —Soltó un suspiro. —No te olvides de cerrar y todo eso. Nos vemos. —Entonces, se retiró.

El lobo gruñó frustrado, pues no esperaba esa reacción. Y, para colmo, no tenía derecho a reclamarle nada. Esa Omega seguía siendo su jefa, así que debía obedecerle. Asimismo, no tenían ni un lazo ni un vínculo; no podía exigir explicaciones.

...

Hope no dejaba de caminar en círculos. Estaba nervioso, muy nervioso, pues el correo que esperaba sería crucial en su investigación. Incluso se mordió las uñas por unos segundos. Sin embargo, debía tomarlo con calma. Dio una profunda exhalación y actualizó la página. Al fin había llegado.

Estimado, Hope:

Por un lado, gracias por la información que nos hizo llegar. Esta acaba de ser archivada.

Por el otro, tenemos las respuestas a sus preguntas:

1. La nueva líder de la mafia BP es la Omega tigre Queen .

2. Sí tiene una relación con la mafia de Kitty García. Aparentemente, en las últimas semanas se han reunido para cerrar acuerdos importantes, aunque no han sido confirmados. No obstante, hemos detectado un movimiento entre las mafias BP, la de RB, la de Kitty García y la de Bunny (se sospecha que hay un nuevo líder). Parece que se reunirán pronto (uno de nuestros infiltrados tenía la información completa, pero ha sido eliminado, así que solo tenemos ese dato vago).

En la PS, esperamos que les vaya bien en su misión.

Cuiden sus espaldas.

X

—Mierda —susurró el Beta. Sus sospechas habían ido más allá de lo esperado. Al parecer, Kitty traía algo grande entre manos. ¿Una alianza? ¿Un pacto? ¿Una expansión? No estaba seguro, pero debía descubrirlo lo antes posible.

De golpe, un sonido lo sacó de sus pensamientos. Era la puerta anunciando que Agust finalmente había llegado.

—¿Hope?

—¡Estoy en la oficina!

El Alfa se acercó y, con un gesto de incomodidad, se sentó en una silla dispuesto a preguntar sobre la PS. Sin embargo, al notar la expresión de su compañero, supo que la información había sido confirmada.

—Será mejor que lo leas por ti mismo —le dijo Hope.

Agust tomó la laptop y leyó el correo. De repente, una electricidad recorrió su columna vertebral. Estaban cerca de descubrir lo que Kitty se traía entre manos, pero esa idea no le acababa de gustar. De igual forma, le contó al Beta sobre lo que escuchó en el prostíbulo.

—Necesitamos ir a esa reunión.

—Tal vez Kitty te invite —le comentó Hope—. Últimamente pasan mucho tiempo juntos, así que mantente prudente. —Bostezó. —Tal vez así saquemos algo bueno de esto. —Rascó su espalda. —Buenas noches.

—Buenas noches —le deseó, mas esa no sería una buena noche, ni tampoco las siguientes.

...

Kitty desapareció sin avisar. Llevaba varios días sin llamar ni presentarse al local. Era como si la tierra la hubiese tragado, así que, lamentablemente, los planes de los agentes debían esperar. No obstante, Hope había comentado que podrían usar a Brittany como testigo, tan solo debían ponerla de su lado.

Los primeros días fue difícil convencerla, pero luego de que Hope tuviera una charla íntima con ella se mostró dispuesta a colaborar. Logró entenderse con ellos y confesar información que ningún informe podría corroborar, aunque una testigo, sí.

—Los lleva a su cubo VIP y los tortura —les contó una vez, mientras la grababan—. Los hace llorar y rogar por sus vidas. Ni siquiera un Alfa ha logrado salvarse de sus torturas ni bien decide iniciar. Por suerte, a mí me dejó libre, aunque con la condición de vigilarlos a ustedes e informarle sobre todo. —Soltó una risita nerviosa. —¡No se preocupen, no lo haré! Estoy de su lado.

Y, así, pasaron un par de días más hasta que Kitty se dignó a llamar. Era un sábado en la noche, cerca de las siete —casi la hora de ir al "bar/prostíbulo" para iniciar el mantenimiento—.

—Agust —le dijo—, tengo una misión para ti. Espero que no me falles.
—Dime lo que tengo que hacer.

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