✨
No se olviden de votar y comentar si les gusta.
✨
Agust no entendió cómo un ridículo Alfa conejo se atrevió a interrumpir su momento ni cómo ese olor a tomate asado y orégano fuese tan odioso. La puerta siguió siendo golpeada con fuerza, como si intentaran romperla. Era incómodo, pero, al parecer, gracioso para la pelirrosa, quien sonrió y fue a abrir, permitiendo que un Alfa pelinegro con los brazos llenos de tatuajes entrara.
—Bunny, un gusto verte otra vez —saludó a regañadientes, con una sonrisa fingida—. No esperaba... tu visita.
—¡Tú! ¡Maldita hija de puta! —le gritó el recién llegado con intenciones de ahorcarla, ignorando que Agust no se lo permitiría.
—Aleja tus manos de mi Omega —ordenó con su voz de mando. Así, logró frenar por un momento a Bunny, mas no esperó que el ataque volviese a ocurrir, solo que esta vez dirigido hacia él. Fue golpeado bruscamente en la cara y pateado en los genitales.
—¿¡Tu Omega!? —Se carcajeó. Luego se dirigió a Kitty: —Le hiciste el mismo juego que a mí, ¿verdad?
—No sé de qué hablas —le contestó con un gesto inocente—. Nunca quise que te obsesionaras conmigo. —Sonrió ladina y miró a Agust, quien ya se había repuesto. —Mátalo —le ordenó sin titubear.
Eso pudo ser una buena evidencia para añadir al archivo, pero la grabadora estaba apagada. Agust había perdido una oportunidad, aunque ya no le interesaba. Solo quería romperle el cuello a ese imbécil que quiso atacar a su Omega. Por una parte, no comprendió el porqué de ese repentino deseo; no obstante, sus instintos le obligaban a actuar. Era la primera vez que no pudo controlar a su lobo, como si alguien más tomara el poder de su ser.
Entonces, se transformó en un enorme licántropo negro de pupilas amarillas y colmillos filosos. Y, luego de unos instantes, ya estaba sobre el cuerpo de Bunny, quien fue inmovilizado rápidamente, perdiendo la oportunidad de dar pelea.
De repente, llegaron Gucci y Hope, ambos preocupados por lo que pasaba. El lobo estaba descuartizando al enemigo de Kitty, lo despedazaba con sus colmillos, sin un gota de asco o arrepentimiento. Mientras tanto, la pelirrosa sonreía de placer, una mueca fría y aterradora, aunque no menos alegre por eso.
—Buen trabajo —murmuró. Luego le ordenó a Gucci que se deshiciera de los restos, mientras ella regresaba a su "hogar", pues la diversión había terminado.
Hope ayudó a su compañero a tranquilizarse. Le dio un vaso con agua ni bien regresó a su forma humana y le acarició el cuero cabelludo, tarareando una canción de cuna.
—¿Está bien, jefecito? —le preguntó Brittany, quien llegaba después de tener una "sesión" con su último cliente.
—No —respondió Agust—. No puedo creer que haya perdido el control. No sé qué me pasó.
—Bueno... Si me deja ser honesta, no es la primera vez que ocurre —reveló la Omega. Rápidamente, Hope prendió la grabadora esperando obtener buena información—. Kitty maneja así a sus subordinados, los esclaviza con su aroma y, cuando deja de necesitarlos, los elimina. Como hoy: eliminó a Bunny y te reclutó a ti.
—¿Eso es posible? ¿Tan poderoso es su aroma?
—No lo creería si no lo hubiese visto con mis propios ojos.
Sin embargo, algo no cuadraba: esa conexión que sintió entre su lobo y esa gata montés. Sabía que no solo estaba nublado por su olor, había algo más entre ellos, estaban unidos por el destino.
✨
ESTÁS LEYENDO
• CAZANDO A KITTY GARCÍA • Historia Original
CasualeKitty García era la jefa de la mafia más peligrosa, la Omega más deseada y temida en todo Perú. Sin embargo, la Policía Secreta ha puesto su vista sobre ella. Agust, un Alfa de la Policía Secreta, será el encargado de cazarla, pero nunca creyó que c...