Siempre En Tu Corazón [G!P]

Capitulo 32

POV Roberta

Sola y vacía. ¿Ahora que tengo? Nada. No tengo nada. He estado aquí por un total de tres semanas o más, de verdad he perdido la cuenta. Lo estaba escribiendo en la pared pero los días pasan y se me olvida anotar, suerte que no se me ha olvidado respirar. Total, lo único que se es que perdí mi nominación de mi Grammy. Me botaron completamente. Ahora realmente no tengo nada.

Lo perdí todo.

Esas palabras resuenan en mi cabeza.

Lo perdí todo. No tengo nada.

No llores Roberta, ¿para que sirve? Dios, no lo puedo contener. Lágrimas caían de mis ojos como la lluvia de las nubes.

-Siempre metiéndote en problemas Roberta, siempre decepcionando a la gente, siempre decepcionándote a ti misma-susurré.

Me limpié las lágrimas, bueno lo que pude.

-Calma, todo con calma.

¿Que me devolverá la calma? Estar fuera de aquí, eso me calmaría pero por ahora, ¿que haré? ¡Mi cuaderno! ¡Escribiré! Si eso haré. Algún sentimiento, lo pondré en papel. Tal vez no mis sentimientos porque la letra será muy depresivo.

A ver de cual situación le dedicaré a este papel.

-Abre el corazón y la mente-susurré.

Inhale y agarre el lápiz.

Ya me enteré que hay alguien nuevo acariciando tu piel
Algún idiota al que quieres convencer
Que tú y yo somos pasado

Ya me enteré que soy la mala y todo el mundo te cree
Que estás mejor desde que ya no me ves
Más feliz con otro a lado
A quien piensas que vas engañar
Sabes bien que eres mi otra mitad

Olvídate de ese perdedor y repítele que yo soy mejor
Que no le eres fiel con el corazón
Que eres mía y solo mi amor
Despídete de ese perdedor
Que imagina que ya no existo yo
Deja claro que aunque intente no lo vas a querer
La verdad es que me extrañas tanto lo sé
Ya me enteré

Regresarás estoy segura de que regresarás
Estas con el por pura comodidad
Aburrida entre sus brazos
A quien piensas que vas engañar
Sabes bien que eres mi otra mitad

Deje el lápiz caer. ¿De donde salió eso? Ni tuve que pensar, solo salió naturalmente. Mi alma desnuda ha tomado un lugar y no la pude detener.

Estoy demasiado tarde para una salvación.

Gane la batalla de confirmar mis sentimientos pero perdí la guerra en controlarlos.

Soy su peor error, la causa de su dolor y su desamor.

POV Mia

Un calor estaba demasiado cerca de mi, uno muy molestoso. Sentí unos labios rozar mi cuello y unas manos vagar por mi cuerpo. Abrí los ojos de golpe para darme cuenta de quien era el culpable.

-¿Que haces?-pregunte.

-Vamos Mia, hace tiempo que no lo hacemos-dijo para después meter su mano en mis pantalones sin aviso.

Yo abrí los ojos un poco sorprendida y molesta por su acción.

-Leo... Leonardo-tartamudeé con cierto nerviosismo.

-Shh, solo déjate llevar-susurró cerca de mi oído para después introducir su mano adentro de mi braga.

Jadeé asqueada y cerré los ojos. Era cierto que no hemos estado juntos íntimamente desde hace unas semanas pero siento que está mal. Ya no me gustan sus besos ni sus caricias. ¿Y si lo detengo? No creo que pueda, tal vez sospechara de que tengo a alguien más. Oh Dios, no creo que lo podría detener. Abrí mis ojos y el ya estaba desnudo sobre mi, quitándome la ropa.