Siempre En Tu Corazón [G!P]

Capitulo 53

POV Roberta

Los días pasan y mi cuerpo cada vez esta más pesado.
Se termina nuestra historia, llego el final. Estoy más que lista para largarme de este país. Intento vivir sin pensar pero es imposible.

Mi dieta consiste de medicamentos, alcohol y un pequeño bocado de un consumible. Me la paso de antro a antro buscando una solución para estos sentimientos. Bailando con la música y con diferentes labios pero no llega el olvido. Estoy cansada de la vida, todo lo que yo sentía lo dejé con una tipa que juré que me quería. Mi cuerpo no reacciona a otras manos, lo que decepciona a muchas mujeres.

-Sabes que con esto no vas a llegar a nada, ¿verdad? Esto no esta bien.

-¿Quien?

-¿Quien?-repitió confundido.

-¿Quien te pregunto?

Me reí.

-¡Roberta! ¡Esto es enserio!

-Oscar, agradezco to preocupación pero soy adulta y he pasado por peor.

-¿No ves? Te estas muriendo de un corazón roto.

-¿Y? Al final de cuentas no es la primera vez.

-Pues esto se acaba ahora-dijo.

Salió del cuarto y oí cómo bajaba las escaleras. Me paré de mi cama de mala gana y lo seguí. Baje las escaleras solo para ver como vaciaba mis botellas de alcohol.

-¿¡Que haces!?-exclame corriendo hacia el.

-¿¡Que haces tú!? ¿¡No ves lo que estás haciendo!? Dices que eres adulta, ¡pues actúa como una! ¡Sigues haciendo las cosas mal!

-¡Si mal no recuerdo, fuiste tú quien me empujó a seguir en esta situación! ¡Tú sabías lo que podía pasar!

-¡No, no sabía porque creía que usarías tu celebro! ¡No sabes nada!

-No te pases-susurre.

-¿Que te va abrir los ojos? ¿Que estés cerca de la muerte como la primera vez?  O tal vez será demasiado tarde y te des cuenta seis metros bajo tierra. Abre los ojos ahora y sálvate.

Dejé de escucharlo. Subí las escaleras y me encerré en mi cuarto. Entre a mi baño, miré a mi espejo y no vi nada. Abrí el grifo de agua en el lavamanos. Me eche agua en la cara y en el cuello.

Se que Oscar quería lo mejor para mi. Ahora se queda la pregunta, ¿cuando abriré los ojos? La última vez que estuve en una mala situación abrí los ojos cuando casi me vuelan la cabeza.

Volví a alzar mi cabeza y mis ojos conectaron con mi reflejo. Ahora veía el problema.

Estaba pálida, flaca, ojeras negras y ojos rojos.

Todas esas semanas de no comer bien, de no ir al gimnasio, de no dormir, de meterme tanto cigarro y de consumir tanto alcohol.

Esto va parar ahora, pero ¿como empezar? Tal vez puedo comenzar por comiendo bien, comiendo sano. Luego puedo contratar un entrenador y puedo poner un pequeño gimnasio en uno de los cuartos extra. Si, eso.

Es hora de ser esa Roberta que alguna vez fue feliz. Esa Roberta de diecisiete. La que en el fondo tenía ganas de comerse el mundo.

Salí del baño y rebusqué entre mis cosas. Saque mi diario. Hace unos años salía al gimnasio cada día de la semana por lo menos por dos horas. Marcaba los días y que hacía, piernas, pecho, brazos etc, repeticiones, cuanto peso podía levantar, mi peso, todo.

Quería volver a eso. Iba mejorar, tenía que mejorar no por nadie sino por mi. Me cansé de complacer a la gente.

POV Mia