Son Gine es perteneciente a la poderosa raza guerrera llamados saiyajin. Siendo en el futuro la última hija de Goku y Milk, pierde a su padre cuando tan solo era una bebé, sin embargo, en el presente es una niña fuerte y con una vida raramente perfe...
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Todos estaban muy atentos al combate que se acontecía en esos momentos. La velocidad era sorprendente, ahora sí estaban peleando en serio.
—Increíble, Goku y Cell son rápidos para pelear – comentó Krillin.
En un momento, Cell le cestó varios golpes en la vara al saiyajin. Cuando logró esquivar el primero, aprovechó para mandarlo arriba.
Se teletransportó detrás de Cell, pero al tratar de darle el golpe, este desapareció para volver aparecer detrás del otro.
—Los dos me han dejado impresionado, su velocidad es inalcanzable.
Se detuvieron luego de darse unos golpes más y Cell habló —Admito que peleas bastante bien, ha decir verdad no pensé que la pelea fuera tan divertida, te felicito.
—Lo mismo digo.
—Las peleas deberían ser así, de lo contrario no tendrían caso. Bueno ya llegó el momento.
—¡Ahí están! – exclamó el afro —. En aquel lugar donde está roto, están utilizando otros de sus trucos – dijo señalando la plataforma.
—Oh sí, ya lo entiendo – apoyó el comentarista.
—No importa el truco que hagan, tengo mirada de halcón.
—Ahora entiendo porque le dicen el mejor peleador. ¡Es usted un genio!
Gine se controlaba. Las ganas de ir a querer mandar a volar a Míster Satan, no eran pocas.
Nuevamente inició la batalla, era una lucha impresionante. Gine no se había creído mucho cuando la Bulma del futuro le comentó que su padre era un hombre con una fuerza extraordinaria. Aun así, no lograba entender porqué no peleaba con todas sus fuerzas.
Hubieron varias ocasiones en las que tanto Cell como Goku, estuvieron a punto de salirse de la plataforma. Aquella restricción, no permitía que la batalla fluyese como el androide quería.
—Esta pelea es extraordinaria y sería una pena que se terminara si uno de nosotros cae fuera de la plataforma. ¿Qué te parece si eliminamos esa regla para que no haya ningún problema? Ya que eso no significa nada para nosotros.
Goku no comprendió muy bien sus palabras y más cuando Cell extendió su mano hacia el suelo —¿Qué va hacer? ¿A qué se refiere con eso?
Tras analizarlo unos segundos y ver como su contrincante mantenía una sonrisa, se dio cuenta de sus intenciones.
—¡Oigan! ¡Apártense de la plataforma! – advirtió el saiyajin en batalla —. ¡Quítense!
Inmediatamente, todos hicieron caso a lo advertido antes de que el enemigo llegara hacerles daño. Afortunadamente, el androide de pelo rojizo, actuó rápido y sacó a los terricolas presentes del lugar.
