Capítulo 16.

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ALAN THOMPSON

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ALAN THOMPSON

(***)

Estamos jodidos.

Me sentí fatal cuando descubrí que Nina me había estado mintiendo. Era muy difícil de asimilar que otra vez estuviéramos pasando por eso. Yo había confiado en ella y, sin embargo, ella estaba ocultándome cosas. Me enojé porque antes también me había hecho lo mismo y los resultados fueron peores.

Visité a mi psicólogo y le mencioné lo que había descubierto. Él me dijo que debía tranquilizarme, que Nina debía tener sus razones para ocultar sus cosas. Hasta podría ser que ella lo pasó por alto. Tal vez había intentado decírmelo y yo la había ignorado. Necesité desvelarme para pensar en ello, Dylan se quedó esa noche y agradecía esa compañía. Yo seguía enojado la mañana siguiente. Yo sabía que Nina se presentaría a los exámenes de Estado, no obstante, cuando la escuché prepararse el desayuno, no quise levantarme a desearle suerte. Mi enojo había ganado.

«¡Qué dramático!»

Cuando Dylan se despertó, media hora más tarde, Nina se había marchado. Me reclamó por qué no lo había despertado. Yo le mentí que no había escuchado cuando ella se había ido y me encerré en el baño para que no me interrogara. Yo sabía bien que si lo miraba a los ojos él descubriría. Fue él quién habló del tema.

—¿Sigues enojado con ella? —Yo me estaba lavando el rostro. La respuesta era muy clara: sí. Es que me sentía ofendido que ella se olvidara de mí. Dylan estaba al otro lado de la puerta—. ¿Estás ahí? ¿Te atoraste en el baño?

—Estoy bien. —Abrí la puerta y él se encontraba con el rostro apoyado en el marco—. No me siento cómodo de hablar con Nina, ¿sabes? Es como si ella hubiera hecho las cosas sin motivo, como si no fueran algo que no tuviese relevancia.

—Pues yo creo que es parte de la vida terminar con las personas que no son buenas con nosotros. —Se sentó en la tasa del baño y dio palmadas en sus muslos, yo me acerqué y me senté sobre él. Apoyé mi cabeza en el hueco de su cuello y Dylan me acarició la espalda—. Tú más que nadie deberías saberlo, Alan. ¿Por qué dejaste a Santiago?

—Porque era un maldito idiota, abusivo y tóxico que solo me hacía daño. —Solo recordar su asquerosa cara me revolvía el estómago, todos los insultos, los abusos y golpes. Él nunca fue algo bueno para mí—. ¿Crees que mi hermano la maltrataba?

No me podía imaginar a Derek haciendo eso. Él podría ser un insensato a veces, pero nunca levantaría la mano a alguien. Pero las personas muestran lo que quieres ver, ¿no? Y eso me dolió más. Nina podría haber pasado por eso mismo y no había avisado nada. Es que, si sufrió maltrato, no debió quedarse callada.

—No, nunca pensaría eso. Tampoco me refiero a que sea la única forma de que alguien dejé de ser bueno para ti. Tal vez ellos dejaron de sentir algo. Tal vez ya no tenían tiempo. O, puede ser también, que ellos quisieran enfocarse en sus proyectos primero. Pueden ser muchas cosas acumuladas las que los llevó a alejarse. —Nina me había dicho que su principal objetivo era entrar en la carrera que ella quería. Tal vez quería enfocarse al cien porciento en ello.

DAYLIGHT Ⓓ (#2) [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora