MI DECISION II

Capítulo 22

Capítulo 22

María no dejó de abrazarlo del cuello... Y solo podía pronunciar una frase...

M: lo siento...

¿Lamentaba la escena de celos en su despacho o haberse pasado de copas...? Por lo menos lo había hecho en un lugar privado y rodeada de su familia, sin cámaras cerca...

M: perdóname, Esteban...

E: hablaremos más tarde... O mañana...

M: no estoy borracha... Te lo aseguro...

E: vamos a sentarnos...

Vero: ¡Es el turno de Esteban!

El susodicho atravesó con su mirada verde a su hermana. Había permitido que María se emborrachara, ¿y ahora pretendía que él cantara??

M: sí mi amor... Canta algo para mí...

^^ 2 horas más tarde...

** CASA PRESIDENCIAL **

-Vestíbulo-

M: estoy bien, Esteban... Te lo aseguro... (Entrando sostenida por él de la cintura, agarrada a su hombro)

Que tambaleara fue suficiente para tomar acciones... Esteban la tomó en brazos y subió con ella a su habitación...

El ama de llaves y 2 muchachas que esperaban despiertas la llegada del Presidente y la Primera Dama suspiraron muy sonrientes mientras los veían subir las escaleras, ella en brazos de él...

"Qué romántico..."

Y ya en la recámara matrimonial, Esteban dejó a María en la cama... Él mismo la desnudó, le puso ropa interior y un camisón limpios y la cobijó... También como pudo le quitó el maquillaje, hizo su mejor esfuerzo, recordando que no era bueno para la piel dormir maquillada...

M: te amo, Esteban... Te amo... (Hablando entre sueños)

E: duerme... (Besándole la frente) Mañana será otro día...

Y qué día le esperaba...

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Comandante en Jefe de un país y esa mañana también de la casa, de sus hijos para ser más específicos.

Pasó por la recámara de cada uno a despertarlos, no lo hacía siempre, aunque antes de irse, fuera la hora que fuera pasaba a darles un beso, o dejarles una nota...

Dio instrucciones que despertaran a la Primera Dama a las 8, teniendo en cuenta que a las 10 de la mañana tenía una reunión en un patronato.

Y ser Primera Dama no la salvaba de los efectos de una resaca, juró en silencio que jamás volvería a beber en su vida, eso mientras intentaba concentrarse en la explicación que le daban en el Patronato De la Cruz Roja.

Café, analgésicos... No podía hacer más por el momento...

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Mediodía y la Primera Dama hacía una visita sorpresa al Ministerio de Salud.

Por supuesto que la Ministra fue quien la recibió.

Luc: Buenas tardes, señora San Román...

M: por favor, Luciana... Dejemos a un lado las formalidades...

Luc: como prefieras, María... Pasa..

M: ¿cómo te sientes...?

Luc: bien... Por el momento bien... Supongo que Esteban te contó...