XXXI

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[2 semanas después]



Jin Zixuan había regresado a LanlingJin para partir de ahí con quienes se supone eran sus compañeros discípulos, después de todo, sería extraño que él, como heredero de una secta prominente, llegara junto al chico que era el Representante Imperial.

Puede que no lo admitiera en voz alta, pero agradecía infinitamente el hecho de haber conocido al revoltoso chico, no solo porque lo había ayudado significativamente en su compromiso con Jiang Yanli, sino que también lo había ayudado a mejorar su relación con su medio hermano.

Gracias al de ojos grises había logrado crecer como persona y también, en parte, como cultivador.

Ahora todo lo que podía hacer era ayudar a filtrar la información que había recolectado su madre, Madam Jin, en los últimos días con ayuda de Min Xinyan, la chica que había sido dejada a su cuidado temporalmente.

—Jin-gongzi. —Escuchó que le hablaron detrás suyo, no era nadie menos que la chica bajita de pelo castaño arreglado en un peinado bastante elegante que consistía en dos trenzas enrolladas en la coronilla de la cabeza decorada con trenzas más delgadas cayendo por debajo, y por supuesto, una horquilla con motivos de rododendros.

Cuando dejó de analizar el peinado, prestó atención a lo que la otra estaba diciendo en ese momento. —Llegaremos hoy por la tarde a Caiyi y es probable que nos encontremos con el joven amo, recuerde que no deben de mostrar familiaridad.

Ah, ese era otro detalle que no iba a ser completamente difícil de llevar a cabo, sin embargo, no entendía del todo el porqué de eso, es decir, entendía perfectamente el hecho de que pasaría toda la información posible a la mujer que estaba bajo su cuidado, pero no el hecho de fingir que no era cercano al Representante Imperial.

A pesar de sus confusiones, él se limitó a responder. —Por supuesto.

Tras su respuesta vaga, fijó su vista en la ropa dorada que comenzó a usar de nuevo. Se sentía tan extraño usar esos colores después de haber evitado usarlos durante algunos meses.

Se aseguraría de cambiar el color de la secta una vez que ascendiera como líder de secta. Al estar pensando en esto, no notó que la mirada de cierta persona buscaba a alguien. 


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En Gusulan las cosas eran tranquilamente un desorden. El ambiente era el mismo, las personas ahí eran las mismas, los líderes eran los mismos, la única diferencia que había era el hecho de que había más movimiento de lo usual.

—¡Viejo barbas locas! —Gritó desde el otro extremo de campo de entrenamiento una mujer que casualmente se trataba de nadie más ni nadie menos que Madam Lan.

¿𝑪𝒖𝒍𝒕𝒊𝒗𝒂𝒅𝒐𝒓? [𝑾𝒂𝒏𝒈𝑿𝒊𝒂𝒏/𝑿𝒊𝒂𝒏𝑾𝒂𝒏𝒈]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora