¿𝑪𝒖𝒍𝒕𝒊𝒗𝒂𝒅𝒐𝒓? [𝑾𝒂𝒏𝒈𝑿𝒊𝒂𝒏/𝑿𝒊𝒂𝒏𝑾𝒂𝒏𝒈]

Final [🌱]

(Ojo que hay temas que puedan ser sensibles para algunos, los tkm<3)

Todos se encontraban dentro de la gran Sala de Reuniones esperando pacientemente a que se diera inicio de manera oficial. Había algunos funcionarios que observaban a los cultivadores de aspecto un poco bastante engreído.

A pesar de eso también había quienes sonreían como si realmente no estuvieran a punto de enfrentar uno de los problemas más grandes durante el gobierno de Xiao Yuandao.

El ambiente era tenso mas nadie se atrevía a intentar hacer que se volviera más ligero, al menos eso era por parte de los adultos; no era lo mismo con los jóvenes herederos a quienes se les permitió salir a conocer el lugar.

Por supuesto que ninguno de ellos desaprovecharía la oportunidad y salieron todos juntos de la habitación.

Dentro de la sala, bajo las duras miradas de los funcionarios los cultivadores compartían de una manera no muy discreta las cosas de las que se habían enterado recientemente. Y Jin Guangshan se sintió gratificado al ver lo que sucedía, la sonrisa detrás del feo abanico que cubría parte de su rostro lo delataba.

Pasaron unos minutos más cuando finalmente Xiao Bo ingresó en el lugar sin mayores prisas, casi ni parecía que los tuvo esperando veinte minutos sin mayor entretenimiento. Los funcionarios saludaron adecuadamente al general a penas lo vieron entrar por las grandes puertas; por su parte, los cultivadores temiendo verse inferiores a los contrarios, también se apresuraron a saludar.

Líder Jin, qué sorpresa encontrarlo levantando falsos chismes acerca de gente que no está presente. —Cuando el hombre de cabello negro pasó frente al líder Jin fue lo que con la intención de molestarlo un poco, casi como si no fuera a molestarlo más dentro unos minutos.

De hecho, es extraño que Rouhan no esté aquí, él siempre llega antes que nadie a estas cosas. Pensó para sí cuando estuvo en su lugar y esperaba pacientemente a que su padre apareciera.

Casi parecía como si lo hubiesen invocado, el líder Wen apareció un par de minutos después con aquella aura tan opresiva que lo caracterizaba. Jin Guangshan se tensó visiblemente cuando la mirada del Wen se detuvo en él y salió una risa de sus labios.

Para el Jin mayor era una vergüenza admitir que Wen Rouhan lo intimidaba de una manera que jamás se atrevería a admitir en voz alta. Precisamente después de que Rouhan ocupara su lugar, los herederos de cada una de las sectas ingresó de una manera tan ordena que era sumamente complicado el hecho de que no hace tan solo unos momentos habían estado discutiendo muy seriamente sobre lo que creían que sucedería a continuación.

Pasó al menos un cuarto de hora más hasta que finalmente la presencia del dragón fuera anunciada por el eunuco en jefe. —Todos levántanse para saludar a su excelencia.

Inmediatamente todos se pusieron de pie mientras las puertas se cerraban a espaldas del Emperador. —Estos saludan a su excelencia, el Emperador.

Mientras era saludado por las personas presentes, Yuandao solo podía pensar en las palabras de su descarado nieto que casualmente había sido el motivo de su retraso.

Había sido un corto intercambio de frases y fue suficiente para hacer que el adulto tuviera la sensación de que a pesar del hecho de que su hijo y su nieto no compartían lazos de sangre se parecían demasiado. O sea, era algo que ya sabía, pero le seguía sorprendiendo como la primera vez que se dio cuenta de ello.

Resultaba que ser que cierto muchacho de ojos grises se las arregló para encontrarse casualmente en el camino con su abuelo y de ahí comenzó una plática sin mucho sentido, lo normal en él. Xiao Yuandao solo lo dejó ser siendo consciente de que sería peor si trataba de detenerlo.