Algunos años antes de que un chico brillante de ojos grises naciera y antes de que la historia de un par de almas gemelas comenzara, existió una mujer despreocupada y de un aura colorida, esa mujer no podía ser alguien menos que la hija de la inmortal de la montaña.
Cuando Cangse Sanren bajó de la montaña era consciente de la misión que le esperaba y sabía lo que debía de hacer, no había ni una sola duda ni vacilación, todo en su mente era tan claro como las tranquilas aguas que había en su hogar.
Su madre, Baoshan Sanren, le había especificado a dónde tenía que dirigirse y con quién debía de dirigirse, ni un detalle más ni un detalle menos.
Ella, siendo una chica inocente con ganas de explorar el mundo, solo tomó las palabras de la mujer mayor y se fue con pasos presurosos al mundo exterior, un mundo que no era amable, pero tampoco era caprichoso.
Los primeros días no sabía qué hacer o por dónde comenzar, estaba más perdida que otra cosa. Todo un lio si le preguntas.
La cultivadora vestía de blanco a sus cortos dieciocho años, a ella no le importaba vestir de ese color porque había pasado toda su vida envuelta en blanco y detalles de flores en colores claros, pero cuando vio que existía ropa de colores más vivos, no dudó en comprar un par de ropas nuevas para sí.
Después de un tiempo, ella llegó vistiendo un atuendo azul celeste y el cabello atado por un listón del mismo color a un muelle que tenía el emblema de un loto morado de nueve pétalos en lo alto. Curioso y peculiar para alguien que apenas está descubriendo el mundo.
Sin temor de nada, ella se adentró en el lugar sin esperar que se conocería a una persona que haría que su corazón latiese de forma desenfrenada y alocada; obviamente tampoco sabía que se encontraría con personas que harían que su vida terminase de forma tan trágica.
En el lugar no solo conoció a la persona que complementaría su existencia, allí también encontró a un buen amigo con el cual conversar y a una mujer con la que probablemente se habría llevado mejor de no ser por la manera en la que se conocieron.
Pasó bastante tiempo en el Muelle del Loto hasta que recordó lo que se supone debería de haber hecho desde un principio, dirigirse a la capital con el sello en mano.
Le tomó un par de días llegar hasta ahí, claro que a su lado siempre estaba su alma gemela, sin embargo, no todo era de color rosa y brillos. A veces tenían encuentros inesperados con criaturas nocturnas que querían asesinarlos, al principio lo tomaron como una casualidad, después dejó de ser una casualidad para convertirse en un intento de asesinato claro.
—No te preocupes, una vez que lleguemos verás que todo estará bien. —Trataron de consolarse cada uno en su propia habitación. —Todo será mejor cuando lleguemos.
Para la fortuna de ellos, estos intentos se detuvieron conforme más se acercaban a la capital. Parecía que le temían a algo dentro de la ciudad.
De esa manera lograron llegar hasta Xi'an, en donde fueron recibidos por la deslumbrante aura del lugar y los sonidos alegres de las personas que paseaban por el lugar. A pesar de eso, no podían demorarse mucho más.
Y así, las dos personas se acercaron a la entrada del muro que protegía el palacio. El muro era imponente con esos decorados detallados y finamente elaborados.
Cuando los guardias vieron a ambas personas llegar con seguridad hasta ellos, no estaban seguros de lo que debería de estar sucediendo. Obviamente, la cultivadora aprovechó la confusión momentánea y se adentró como si fuera su casa, que realmente lo era solo que ella no lo sabía en ese momento.
Para el instante en el que los guardias reaccionaron, la mujer ya estaba bastante lejos siendo seguida de cerca por un hombre que parecía un poco tímido, pero sin perder la confianza de sus ojos.
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¿𝑪𝒖𝒍𝒕𝒊𝒗𝒂𝒅𝒐𝒓? [𝑾𝒂𝒏𝒈𝑿𝒊𝒂𝒏/𝑿𝒊𝒂𝒏𝑾𝒂𝒏𝒈]
Hayran KurguWei Ying no fue llevado a Yunmeng Jiang , si no que fue acogido por un general importante. ¿Quién se hubiera imaginado que a partir de entonces sería el heredero de todo un imperio? ✧✧✧✧✧✧✧✧✧✧✧✧ Leer la primera nota xfa 👀 ⚠️ Primer capítulo sin ed...