Capítulo 124 - El legado de Hipatia

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Aquella semana en el castillo antes del comienzo de las clases fueron tan incómodas como extrañas

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Aquella semana en el castillo antes del comienzo de las clases fueron tan incómodas como extrañas.

Había descubierto facetas ocultas de los que por muchos años fueron mis profesores: Flitwick y Hagrid solían tomar demasiado vino de elfo cuando no había alumnos delante; Trelawney y Vector solían pasarse la velada discutiendo entre ellas y la profesora de runas; la de herbología eran grandes amigas y la tímida profesora de estudios muggles ocasionalmente entablaba conversación con Severus.

También descubrí que Severus me había guardado un gran secreto, uno que no me agradaba especialmente. Su cambio de asignatura, impartir Defensa Contra las Artes Oscura en lugar de Pociones, acarreó un par de acaloradas discusiones.

El primero de septiembre hubo una comida del personal docente en el despacho del director.

A partir de esa noche cenaría en mis aposentos. Era bienvenida en la mesa de profesores, pero decidí solo unirme a ellos durante los periodos en el que no hubiese muchos alumnos.

Era agradable poder hacer vida en la habitación del jefe de Slytherin sin tener que preocuparme por nada.

– Señorita Malfoy – el hombre en parte duende inició la conversación.

– ¿Sí, Señor Flitwick?

– Chiquilla, ¿cuántas veces he de decirte que me llames Filius?

– Disculpeme, es la costumbre – me escusé tomando la servilleta para limpiarme la boca.

– Al menos no nos llama profesores – intervino la jefa de Hufflepuff –. Ya es más avance de lo que cualquier interino ha tenido.

– Decía – continuó el profesor de Encantamientos – que si seguirá tomando su maestría con el Señor Snape aun sin ser el actual profesor de Pociones. Dudo que Slughorn ponga inconveniente en tener a una jovencita merodeando por su aula.

– Creo que he tomado la decisión correcta – me limité a decir.

– Entre nosotros – comentó como si fuera un secreto, pero se encontraba en la otra punta de la mesa – Horace Slughorn es un poco... Cómo decirlo...

– Convenido – indicó McGonagall.

– Exactamente – asintió con fervor el jefe de Ravenclaw.

– ¿Y es buen profesor? – pregunté interesada.

– No – Severus abrió por primera vez en toda la comida la boca.

– No creo que seas quien para decir eso – intervino el director –, nunca ha habido tantos reprobados en la asignatura.

– Muchos más alumnos hubieran entrado al ala hospitalaria si esos incompetentes siguieran libros de texto mal escritos. Casi todos aprobarán, pero los mejores estudiantes bajarán las notas.

Dark Shadow ~Severus SnapeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora