Había llegado el momento de seguir con su tradición.
Celeste y sus amigos iban a viajar a algún pueblo. Ninguno tenía claro de a donde iría, solo buscarían en la web pueblos poco civilizados (lo mismo que hacían todos los años) y escogerían uno al...
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Maraton 3/3
NARRA CELESTE GREY
¿Qué hago ahora?
No puedo quedarme aquí.
No, no hay manera.
Tengo urticaria acuagénica aguda, básicamente es una condición en la cual se desarrollan ronchas con picazón rápidamente después de que la piel entra en contacto con el agua de lluvia, no importa su temperatura, uno dice "ok, si te mojas con lluvia te salen ronchas, pero con cremita eso se va" y si, yo también pensaba que era fácil, pero hay un problema, la palabra "aguda", este tipo es más peligroso, la piel se hincha y en ocasiones sangro, todo por la maldita lluvia.
Cierro mi portátil y me levanto, si corro quizás alcance a llegar a la residencia, pero algunas góticas me caerán, de verdad que prefiero una que otra roncha a quedarme aquí y que todo el cuerpo se me llene de ronchas, así que lo hago, empiezo a correr lo más rápido que puedo, paso por las diferentes bancas y los árboles parecen iguales, el camino se me hace largo y llego a pensar que no estoy avanzando, es horrible.
Sigo corriendo y siento como el aire empieza a faltar en mis pulmones, mis articulaciones arden y mis ojos pican, pero el miedo y la adrenalina que corren por mis venas son más fuertes y me impulsan a seguir, salgo del parque y a lo lejos veo la residencia, un destello de esperanza cae sobre mí, pero rápidamente se aleja, pues me he tropezado con una piedra que estaba salida, me encuentro en el suelo y la lluvia ha comenzado, las lágrimas empiezan a salir de mis ojos, me duele muchísimo mi brazo y las gotas de agua queman en mi piel, trato de sentarme y cuando lo hago veo mi portátil, se ha caído unos metros adelante, me levanto y la tomo, pero mis pies duelen tanto que vuelvo a caer, ya no puedo mantenerme de pie, observo mis brazos y las ronchas ya han empezado a salir, cada gota que cae sobre mi deja una roncha y un pequeño punto de sangre, trato de cubrirme lo más posible, pero es inútil, lentamente me arrastro debajo de un árbol para escapar de la lluvia, trato de mantenerme despierta, esta es una de las cosas que más odio de la urticaria aguagénica aguda, me empiezo a sentir muy cansada, siento un vacío en todo mi cuerpo y mis ojos se cierran.
—¡¡CELESTE!! — Es lo último que escucho antes de que una oscuridad profunda me envuelva.
NARRA LEANDRO STONE
No debí dejarla e irme así.
Ella no estaba bien.
Celeste estaba intranquila.
Debí haberla acompañado, así sea que estuviera sin hacer nada por lo menos sabría que ella no estaría sola, pero fui idiota y ahora solo puedo pensar en encontrarla, las nubes advierten una tormenta bastante fuerte y Celeste es alérgica a la lluvia, muy alérgica a la lluvia, literal puede desmayarse, desangrarse y quien sabe que cosas más por la maldita lluvia, debo admitirlo, antes de conocer a Celeste me gustaba la lluvia, pero ahora solo me preocupa.
