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— No te sorprendió la noticia. —

— ¿Eh? —

— Cuando Mikey disolvió la pandilla. —

— Ah eso, bueno antes de la reunión hablé con él para renunciar. —

— ¡¿Que?! — Gritaron a la vez Chifuyu y Takemichi.

— Pero, ¿Entrar a Touman no era lo que deseabas? —

Negué mientras me llevaba otra golosina a la boca.

— Yo ya estaba en Touman. — Sonreí cuando Baji vino a mi mente.

— Es verdad que eres la septima fundadora pero...

— ¿¡Eres la séptima fundadora?! —

Chifuyu y yo lo miramos confundidos. — ¿No lo sabías socio? —

Takemichi empezó a balbucear y murmurar para sí mismo sin dar una respuesta clara.

— Objetivos Matsuno, objetivos. Quería que Mikey valorara mi fuerza de manera oficial, lo ha hecho y yo he hecho lo que tenía que hacer. En cuanto cumples un objetivo ya tienes otro en mente que lograr. —

— Así que cuando le dijiste a Mikey que dejabas la pandilla te contó que iba a disolverla. —

Asentí en respuesta a Takemichi.
Los tres seguimos caminando hasta llegar al templo de Musashi y reunirnos con los demás.

Cuando ya estaba el espacio listo empezamos todos a dejar nuestras cartas y objeto importante, abrí la pequeña mochila que traía conmigo para dejar ambas cosas al igual que hacían los demás.

— En doce años, el 19 de julio, en el día de la formación de Touman... ¡Volvamos a encontrarnos aquí! —

𝐈 𝐖𝐀𝐍𝐍𝐀 𝐁𝐄 | 𝖳𝗈𝗄𝗒𝗈 𝖱𝖾𝗏𝖾𝗇𝗀𝖾𝗋𝗌Donde viven las historias. Descúbrelo ahora