𝐈 𝐖𝐀𝐍𝐍𝐀 𝐁𝐄 | 𝖳𝗈𝗄𝗒𝗈 𝖱𝖾𝗏𝖾𝗇𝗀𝖾𝗋𝗌

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Estaba en trance mientras South se abría paso. Todos estaban enfrentándose pero yo solo tenía ruido en mi mente. No debo interferir, ¿O si? Me siento desorientada y la información que se habia quedado pausada en mi mente se volvió a reproducir. Acababa de morir Draken, sin embargo, Takemichi evitó la muerte de Senju.

Eso me hacia pensar en el equilibrio divino que la gente llega a creer, ¿Realmente existe algo así? Una vida por otro vida. Por muy mal que suene, no estaba dispuesta a sacrificar a Draken por Senju, no estoy dispuesta a dejar ir a Draken.

— Aún podemos cambiar las cosas. — Takemichi, quien estaba a mi lado, me miró. Él seguramente se encontraba en mi mismo estado o peor. — Somos los únicos que podemos. —

Como si quisiera evitar mi mirada, apartó la suya, dirigiéndola del suelo a la pelea repetidas veces.

— ¿Por qué ella? — Pregunté ya sabiendo la respuesta, él no tenía la culpa y no podría saber que Ken acabaría así.

— ¿Por qué ella? — Me devolvió la pregunta, suspiré sabiendo a lo que se refería.

Busqué a Mikey con la mirada, encontrándole ahí parado observando la situación, al igual que nosotros. Ya no sentía enfado o tristeza, me sentía decepcionada.

— Nos conocimos siendo pequeñas, ella quería ser mi amiga pero sus intenciones no siempre eran buenas. Me llegó a envidiar y cada vez que podía trataba de superarme. —

— ¿Es eso? ¿Peleas de críos? Por eso la quieres muerta. —

— Te equivocas. — Mi vista se posó en Senju, quien por fin había decidido tomar el control de la pelea, tomar el papel de líder, inconscientemente sonreí de lado. — No estuvo bien decir eso pero tampoco estaba de ánimos. —

— Tienes un plan, ¿verdad? —

— Ella no entra en mi plan. — Pude escuchar su suspiro, entendía su cansancio mental pero él también me debía entender a mi. — Mientras yo intentaba ayudarla, ella solo quería hundirme, puede que no quisiera hacerme daño pero lo hizo. —

Estábamos siendo espectadores de la fuerza de la líder de Brahman, yo solo trataba de contenerme de no volver a entrar en la pelea, pero quedarme quieta es algo que no disfruto.