capítulo 24 "10 personas sentadas en una mesa"

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“10 personas sentadas en una mesa”

La molestia de Luhan se expresó en sus cejas. Arrugó la frente y aventó el celular al piso, haciéndolo chocar con la alfombra. De hecho por eso estaba esa alfombra ahí, para  que cuando Luhan aventara sus objetos costosos, estos no fueran a desarmarse. Se acostó en la cama y cerró los ojos, todavía molesto; le habían mandado un mensaje de Telcel, que decía:

CON EL PAQUETE AMIGO 100 OBTIENES 80 MEGAS + 80 MINUTOS + 80SMS POR SÓLO $100. VIGENCIA DE 15 DÍAS. ACTÍVALO ENVIANDO PA100 AL 5050. INFO: WWW. TELCEL.COM.

¿Quién demonios quería 80 minutos, 80 mensajes y 80 megas ahora? Luhan sólo deseaba que su Papishingo le llamara de una vez por todas. Sin embargo todo parecía en su contra y cuando eso pasaba, era muy terrible.

Ya decidido, el rubio buscó entre sus apuntes para comenzar a hacer la tarea. No era que siempre cumplía con la tarea, pero todavía no tenía nada bueno que hacer y eso lo obligó a tratar de hacerla, hasta quedarse dormido.

Al cabo de un gran tiempo durmiendo, su celular comenzó a sonar. Sin emocionarse, Luhan se volvió a acostar; era el sonido de su alarma de las 10 pm. Cuando el celular dejó de sonar, fue por él. Oprimió la tecla de desbloquear y frente a sus ojos estaba un icono de sobre, marcando que había un mensaje nuevo de un número desconocido. De igual manera no quiso hacerse ilusiones, ese mensaje quizá podía ser de un desconocido que se equivocó al marcar el número, tal vez era su padre pidiendo disculpas o Xiumin dándole su nuevo número… todo menos Sehun. Pero luego recordó que su padre no tenía ni la más mínima intención de pedirle perdón, así como Xiumin días antes le pasó su nuevo número de móvil, dejándolo sólo con una opción: una persona se había equivocado  de número. 

Ronroneando, oprimió “ver el mensaje” No tenía nada que perder, así como tampoco debía ser malo fisgonear sus propios mensajes, al fin y al cabo era su celular y si ese buen samaritano se había equivocado, entonces Luhan no tenía nada de culpa al leer el escrito. 

“No es que me importe demasiado, es sólo que mi amigo Tao nunca defiende a nadie aparte de sus amigos. ¿Ya te sientes mejor?” 

Los ojos de Luhan se entornaron, sonriendo insanamente. El brillo que sus orbes emanaron fue de pura felicidad. Sehun, sí, su Papishingo le había mandado un mensaje y eso era lo más asquerosamente genial que nunca antes tuvo. Su corazón bombeó más sangre, acelerado y modesto, al mismo tiempo que con el rabillo del ojo miraba la hora de envío. Sehun le mandó el mensaje  a las 8:30 y eso marcaba muchas horas de atraso. Se golpeó la cabeza, culpándose por haberse quedado dormido y rápidamente descargó la aplicación WhatsApp para poder platicar por ahí; no tenía crédito en su celular y eso lo ponía gravemente de mal humor. 

Cuando la aplicación estuvo instalada y lista para usarse, le mandó un mensaje a Sehun, que decía:

“Si no te importa, entonces ¿para qué el mensaje? Gastaste posiblemente 1$ y para nada”

Al mandar, juntó las manos para rezarle a Zeus y así poder comenzar de nuevo con el amigo de Tao. ¿Se notaba mucho su desesperación? Esperaba que no, ya que estaba trabajando demasiado para no dar a conocer su lado histérico y enamorado.

Buscó entre sus contactos y añadió a Sehun con el nombre: Papishingo ♥♥. Esta vez le añadió dos corazones para ejemplificar la segunda oportunidad que se estaban dando ambos y lógicamente para agrandar su amor.

El móvil le vibró, avisándole que había un nuevo mensaje. Lo vio.

Papishingo ♥♥

Lover's Spit [TaoRis]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora