A Kim Namjoon y Hong Misuk les encantaba encontrar momentos para compartir entre semana, los ayudaba a liberarse un poco del estrés de sus clases. Aunque fuesen de la misma edad y por ende, del mismo salón, verse solo en el ambiente profesional no era exactamente de lo más romántico del mundo. Por eso mismo, el par de almas gemelas solía escapar del complejo facultativo cada vez que se les presentaba un rato libre. En el caso de esa semana, estaban cenando afuera, a unas cuántas calles del lugar, como si de una cita de película romántica se tratara. Ninguno de los dos era muy fanático de los lujos, por lo que el lugar que habían elegido para esa ocasión había sido el más económico y sencillo, pero no por eso menos especial. Lo habían visitado con anterioridad, así que algunos camareros ya hasta los reconocían. Todo aportaba a que las cosas se sintieran súper cálidas allí para la pareja, y el cansancio de estar en medio de un nuevo comienzo en la universidad se sentía lejano gracias a ese rato juntos. Luego de la linda comida, no solo pasearon por los alrededores tomados de la mano para disfrutar de las estrellas, sino que en esa oportunidad incluso habían decidido ver una película en el primer cine que encontraron abierto a esas horas. Probablemente se arrepentirían a la mañana siguiente de haberse dormido tan tarde, pero lo valía.
No fue hasta la vuelta en taxi hacia el campus que el chico revisó su celular por primera vez en toda la velada, descubriendo un mensaje de Park Jimin, quien obviamente reconocía por haber sido alumno de su acompañante. Lo comentó de forma simpática, preguntando, antes que nada, si había sido ella quien le había pasado su contacto, y sonrió al recibir una respuesta positiva de parte de su chica. Mirando el reloj, se sorprendió de la hora que era, pues eran pocas las veces en las que volvían pasadas las dos de la mañana a sus habitaciones.
— ¿Crees que Park me quiera pedir algo relacionado a los estudios? No sé si puedo ser tan buen tutor como tú. — Bromeó mientras caminaban por el espacio verde que rodeaba a la facultad, aunque ya debían de separarse a esa altura. Cada uno debería de tomar camino hasta la residencia correspondiente, pero la charla estaba mucho más interesante, por lo que terminaron sentados en las escaleras de entrada al edificio principal.
— En realidad, yo ya sé por qué quiere escribirte. Pero no creo que me corresponda decírtelo de antemano. — Se encogió de hombros divertida, causando mucha ternura en el contrario, quien depositó un pequeño beso en su frente. — ¿Necesitas algo más antes de que nos separemos, bebé?
— Me gustaría poder ir a dormir contigo. — Admitió. — Pero con soñarte me conformo.
— Tonto. Asegúrate de llegar a salvo y descansar bien, ¿okay? Mañana tenemos clases demasiado pesadas.
— Por supuesto, tutora Hong.
Una vez en su cama, con un Jeongguk más que dormido al otro lado de la habitación, el castaño decidió que lo mejor era recordar a la mañana siguiente la idea de responderle a Park. No quedaría muy bien visto aparecer a esas horas de la noche en plena semana ¿o sí? Antes de causar una mala impresión, o molestar, prefería esperar. En caso de que hubiese sido una emergencia, hubiese llamado o dado alguna otra señal ¿no es cierto? No fue hasta la mañana siguiente, mientras se preparaba para ir a clases, que tomó el aparato nuevamente para leer mejor el mensaje del más joven. Saludó a su compañero de habitación también, quien se mostraba bastante cansado esa mañana, como si no hubiese dormido tanto como deseaba. Él no sabía que Jeon se había dormido poco antes de su llegada por culpa de un trabajo práctico introductorio de una de las asignaturas. Cuando se enteró, se sintió un poco avergonzado de saber que el chico entonces sabía que su vuelta a la habitación había sido bastante tarde. Jeongguk intentó calmarlo, diciéndole que no se iba a meter en lo que su mayor hiciera, y hasta se mostró enternecido por la vergüenza de Kim, pues notaba lo reservado y respetuoso que era como para pensar que había estado haciendo cochinadas hasta tarde por allí. De todas formas, hizo un par de chistes al respecto para aprovechar dicha timidez antes de salir del cuarto primero para irse tranquilo a empezar su día lectivo.
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byeol (별); pjm + jjk
Roman d'amourEn un mundo en el que las almas gemelas nacen con una marca distintiva en alguna parte de su cuerpo, que las ayuda a unirse, Jeongguk, un joven coreano que comienza su primer año de universidad, ha vivido gran parte de sus años engañado, pensando qu...