— Creo que ese va perfecto, sunbae. — Asintió Jeongguk cuando Namjoon le mostró el tercer pantalón de la noche. Se estaba preparando para un cita con su chica y no encontraba algo que combinara con la camisa nueva que había comprado esa mañana de sábado. Según el mayor, Jeon había demostrado un excelente sentido de la moda en ese poco tiempo que llevaban conviviendo, así que le había pedido aprobación a su outfit. — Seguro a Misuk sunbae le encanta.
— ¡Ojalá! — Sonrió mientras terminaba de acomodarse. La idea era ir a buscarla al edificio de chicas en poco tiempo. — Menos mal que esto de las almas gemelas es irreversible, porque si fuese por mi gusto en la ropa, creo que ya la hubiera desencantado hace mucho. — Bromeó. Vio como la expresión de Jeongguk cambiaba con la mención de aquel tema, recordando lo que había charlado con Park un par de noches atrás. La promesa de averiguar qué tan mal se ponía Jeon iba a ser cumplida, solo que aún no había encontrado el momento ideal. Ahora parecía serlo, así que prosiguió: — Lo siento por mencionar el tema. Olvidé que tú no—
— Está bien, sunbaenim. — Lo paró en seco, mostrándole una sonrisa y dejando su lugar en la cama para pararse y quedar frente a él. La sonrisa que le regaló fue sincera, según lo que Kim pudo notar. — No tienes por qué dejar de mencionar a tu alma gemela por mí.
— ¿Estás seguro?
— ¡Por supuesto! ¿No fui yo quien te pidió que le cuentes la historia completa de cómo se conocieron? — Asintió, pero se encontraba bastante confundido. Por cómo reaccionaba ahora, casi que parecía que lo que Park juraba era un invento. Era la misma persona de siempre, y aunque no se notaba cómodo con la cuestión, no parecía estar a la defensiva. Supuso que entonces sí era algo en contra del rubio, pero decírselo no sonaba muy alentador.
Namjoon tenía una cita en la que concentrarse esa noche, y muchas otras cosas de las que ocuparse más que llevar y traer secretos entre dos estudiantes más pequeños. No sabía siquiera cómo había terminado arrastrado en ello, pero sí estaba seguro de querer salir para dejar de comprometerse. Hablaría con Jimin tan pronto como recordara que tenía esa tarea pendiente; mientras tanto, no podía hacer más que seguir con su vida y procurar por su propio bien.
Park Jimin estaba aturdido con tantos deberes, no podía creer que con solo una semana de clases ya hubiese tenido que sacrificar su fin de semana para quedarse cumpliendo con todas las asignaturas pendientes que tenía. Incluso habiendo estudiado después de cada mañana de clases y adelantando trabajos a altas horas de la noche, no se sentía nada tranquilo ni al día, por lo que su único movimiento del fin de semana había sido de la cafetería a la habitación y viceversa. Yoongi, por su parte, estaba un poco más liberado que él porque el pelinegro sí que había estudiado como animal, terminando todos sus trabajos el sábado por la tarde. Desde entonces, había acordado con Park darle espacio durante el día para que este pudiera concentrarse full y llegar a cumplir con todo. Aunque estar en la habitación por sí solo a veces era más un martirio que una ayuda para enfocarse. A decir verdad, el chico revisaba su teléfono a cada rato desde el viernes, esperando un dato de Kim Namjoon que nunca llegó. Ya estando en la noche del domingo, seguía sin saber nada de él, ni de Jeongguk. Eso no podía significar nada bueno ¿verdad?
Las ganas de escribirle al menor eran cada vez más grandes, pues si Kim al final no podía ayudarlo, entonces quería hacer las cosas por sí solo y avanzar. No sabía exactamente a qué se refería con esa palabra, pero aún así sentía que debía hacerlo. Las cosas con el contrario no habían terminado muy bien, claramente, y desde ese entonces habían estado lejos. Si Jeon estaba enfadado aún, entonces confirmaría su teoría de que las almas gemelas eran un tema intocable para el chico; por el contrario, en caso de que actuara como si nada, entonces entendería que simplemente hubo lejanía porque no había mucho interés de su parte en contactarlo. Ninguna opción le parecía atractiva, pero sí prefería una antes que la otra.
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byeol (별); pjm + jjk
RomanceEn un mundo en el que las almas gemelas nacen con una marca distintiva en alguna parte de su cuerpo, que las ayuda a unirse, Jeongguk, un joven coreano que comienza su primer año de universidad, ha vivido gran parte de sus años engañado, pensando qu...