byeol (별); pjm + jjk

CAPÍTULO 45

Jimin suspiró cuando a la mañana no encontró a su novio en la cama al despertarse. Supuso que estaría en el baño, por lo que eligió que lo más prudente sería ir al de abajo para esperarlo allí. El reloj marcaba pasadas las once, así que le pareció un buen plan desayunar. Pero cuando estuvo en la planta baja terminó por sorprenderse, pues había ruidos provenientes de la cocina, y se encontró al menor volcando cereal en un bowl, a la vez que ya había varios cuencos preparados con otras cosas. No pudo evitar sonreír al ver esa hermosa imagen de Jeongguk, que ya se había deshecho del pijama prestado, mientras preparaba todo, por lo que tardó bastante en hacerse notar. Y el más joven se acercó a él para besarlo como saludo y le explicó que ya casi terminaba con sus platillos para llevarlos a la mesa, tarea que realizó Park una vez que pudo ir al baño como había planeado inicialmente.

— No tenías que hacer todo el desayuno tú solo. — Aclaró el dueño de casa mientras masticaba un trozo de manzana. Jeongguk había preparado fruta, jugo, cereales, huevos y hasta sopa. Sin dudas había mucho trabajo detrás y daba a entender que el chico llevaba tiempo despierto, por lo que se animó a consultar después.

— Digamos que me despertaron tus padres. De todas formas, no me puse a cocinar hasta pasadas las nueve, quería llegar a tener al menos algo listo para cuando despertaras.

— Hiciste comida como para veinte. — Bromeó.

— Son tres en casa, puedes dejarle algo a tus padres como agradecimiento.

— Sí que quieres quedar bien con tus suegros ¿eh?

La comida transcurrió de forma tranquila, y efectivamente quedaron restos que podían abastecer a la familia Park al menos para el desayuno del día siguiente, así que el chef se consideró satisfecho de que su plan hubiera dado resultados. Sentía que le debía mucho a la familia de su novio, no solo al mismo Jimin, así que pretendía que la comida fuera un modo de demostrar su gratitud. Además, no iba a quedarse mucho tiempo más, por lo que apenas vio la oportunidad, anunció su ida. Jimin insistió en que podía quedarse, pues era obvio que almorzaría solo, pero el chico insistió en querer comer con su familia. Aunque en realidad, más que compartir con ellos, solamente quería asegurarse sobre cómo estaría el clima para su vuelta. Así que, una vez en el taxi, pidió a su hyung que le contara más o menos qué excusa le habían metido a su madre sobre su ida tan repentina del día anterior. Según Wooseok, le habían dicho a Eunji que había ido a pasar el domingo en casa de los Kim para poder despedir a Taehyung esa mañana, así que solo tendría que seguir esa historia cuando su madre hiciera preguntas y todo pasaría. Al recibir ese mensaje se percató de que para ese horario su amigo ya estaría en camino, por lo que le escribió un lindo mensaje con buenos deseos antes de llegar a su hogar.

No pasó mucho desde que abrió la puerta hasta que fue bombardeado por preguntas, y por una madre bastante alterada. Su hermano y su padre no parecían estar en el mapa, así que desistió de que alguno lo defendiera mientras Eunji gritaba cosas que el contrario no se molestó en escuchar.

— ¡Jovencito! ¡Te estoy preguntando dónde estabas!

Como sabía perfectamente que su padre y hermano se habían encargado de ese tema, decidió responder de lo más tranquilo, pero eso no bastó para que la furia de la mujer se desvaneciera.