Que la época de exámenes coincidiera con la llegada del verano y los días soleados les parecía a todos los estudiantes, sin duda, una calamidad. Julio era probablemente el mes que más esperaban todos los jóvenes para poder salir y disfrutar de la luz natural y los hermosos espacios verdes que ofrecía la capital, pero la mayoría de ellos se encontraba encerrada en sus habitaciones de facultad estudiando para los interminables exámenes de medio año. Jeongguk ni siquiera tenía energía para salir al patio como solía hacer en un principio, puesto a que solo significaba sentarse y leer haciendo el esfuerzo de que el sol no quemara sus preciados ojos, y eso terminaba por ser más contraproducente que efectivo. Estaba cansado, y harto de estudiar también, queriendo pasar sí o sí las tres asignaturas que le quedaban. Las semanas de prueba se estaban pasando demasiado rápido, le parecía súper loco que estuviera a punto de comenzar la última, y a la vez temía por la revelación de notas, porque no estaba tan certero en todas las áreas. Hasta el momento, no se había dado el lujo de parar y preguntarse qué tal le habría ido, porque sabía que si lo hacía terminaría por obsesionarse con las materias ya rendidas en lugar de focalizarse en las que aún le faltaban.
En cuanto a su vida social, pues no había hecho mucho más que compartir con Namjoon, Misuk, Jimin y Yoongi. Se había formado un grupo, podría decirse, y hasta se habían ayudado a estudiar en varias ocasiones. O bueno, mejor dicho, todos los superiores lo habían ayudado en ciertos momentos, porque era el único novato allí. Había intentado unirse a un grupo de estudio con algunos compañeros, pero le había parecido demasiado abrumador y dejó luego de la segunda reunión. Después de todo, salir o moverse demasiado por la facultad era mucho trabajo en épocas tan estresantes. Por eso también llevaba tiempo rechazando propuestas de salidas de Park. En parte, porque de verdad siempre estaba cansado o estudiando, aunque también era porque no se animaba a pasar tiempo a solas con él después de todo lo ocurrido con él en meses anteriores. La temporada de exámenes le vino como anillo al dedo para intentar controlar sus emociones y olvidarse un poco de aquel tema tan controversial para él. Por suerte, parecía que el mundo era normal en tiempos así, ya que nadie tenía tiempo para hablar de marcas o parejas. Menos su hermano, y su mejor amigo. Pues ellos estaban más que contentos con sus respectivas novias y cada vez que hablaba con ellos, a pesar de estar súper estresados y cansados, siempre tenían una sonrisa cuando de ellas se trataba. Y sí, en esos casos Jeongguk recordaba que él nunca podría tener esa certeza, pero su mente estaba tan llena de data que no se quedaba procesando esa información por mucho tiempo.
— ¿Una fiesta?
Oyó decir a Namjoon, que hablaba con alguien en la puerta de la habitación. Dejó entonces sus apuntes de lado y se levantó de su silla para saber de quién se trataba. No conocía al chico, pero lo saludó con un movimiento de cabeza y se presentó en un susurro. El contrario resultó ser Kang Minho, compañero de su roommate. Estaba ahí para comentarle a Namjoon que se haría una fiesta de fraternidad a unos pocos minutos del campus el fin de semana siguiente para celebrar el fin de los exámenes y la pronta venida de las vacaciones. Kim no se mostraba muy convencido, por eso mismo se sorprendió de que el menor fuera quien le dijera que tal vez era buena idea. Ni siquiera Jeon sabía por qué estaba sintiendo ganas de asistir, pero ahí terminó: conversando con Kang al respecto.
— Fue un placer conocerte, Jeonggukssi. Si puedes convencer a Namjoon para el próximo viernes, te aseguro que te regalaré todos los apuntes de primer año que necesites. — Prometió entre risas antes de retirarse.
La habitación, después de eso, quedó totalmente en silencio. El castaño se sentó en su cama, dispuesto a leer unos apuntes que yacían allí, mientras que el menor quedó parado observando como el chico lo ignoraba.
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byeol (별); pjm + jjk
RomanceEn un mundo en el que las almas gemelas nacen con una marca distintiva en alguna parte de su cuerpo, que las ayuda a unirse, Jeongguk, un joven coreano que comienza su primer año de universidad, ha vivido gran parte de sus años engañado, pensando qu...