Del Ἔρως al ἀγάπη ~Jikookmin~

IV -Aponia (ἀπονία)

-¡Ey! ¿Qué hacéis? -Preguntó Hoseok al llegar junto a sus compañeros, con su cara enseñando su mejor sonrisa, evitando mostrar lo que realmente sentía. -¿Qué es lo que pasa? -Preguntó al ver las caras de sus compañeros.

Acababa de llegar de un chequeo médico, por los recientes desmayos que ninguno de sus amigos estaba al tanto, que le había impedido presentarse a las primeras clases de la mañana.

Le sorprendió ver que no era el único que, al parecer, no había pasado una buena noche. Las ojeras desfilando en sus ojos le hacía saber que casi todos habían sido igual de desdichados que él y se sintió peor por no haber podido acompañar esa mañana a Jimin hasta la escuela sabiendo que habría ido con sus padres.

-Al parecer, ninguno hemos tenido una gran noche de sueño. -Indicó Yoongi sin levantar su vista del trabajo que estaba haciendo para terminar cuanto antes.

Hoseok se sentó junto a su mejor amigo y le susurró:

-Minnie, siento no haber podido acompañarte esta mañana. ¿Todo bien con tus padres?

Jimin le miró con una mirada llena de ternura y le acarició la mejilla con una sonrisa.

-Lo normal. Además, esta mañana he venido andando.

-¿Qué? ¿Por qué?

-No te preocupes, Hobi. He venido con Yoongi-hyung y con Jungkookie. Los encontré por el camino, así que, todo está bien.

Hoseok asintió, más aliviado, pasando su brazo por la espalda de su amigo y dedicándole una suave sonrisa, desviando después su atención sobre Taehyung, quien le contaba sobre lo qué se había perdido esa mañana en clases.

Yoongi, por su parte, no dejaba de tener a Jungkook sobre él y sabía que estaba deseando preguntarle algo pero que, por su brusquedad en la mañana, mantenía el silencio junto a él, comiendo de su bandeja sin dejar de mirarle de reojo.

No estaba acostumbrado a compartir sus secretos con nadie y, sus emociones y sentimientos eran su mayor secreto. Esto, sin querer, se plasmaba en cada una de las letras que escribía y que, por su descuido, esa mañana habían acabado en las manos del menor, quien ahora estaría ansioso por preguntar.

Su intención era abandonar la mesa pronto para entregar el trabajo rápido, incluso antes de que terminase el plazo, y así librarse de la curiosidad del menor.

Al parecer, no era el único en querer abandonar la mesa.

Namjoon estuvo perdido en sus pensamientos durante casi todo el almuerzo, observando cada dos por tres el reloj en su muñeca e ignorando la mayoría de las conversaciones, respondiendo con débiles asentimientos de cabeza y, cuando quedaban diez minutos para que la campana diese aviso del inicio de una nueva clase, se levantó bajo la atenta mirada de Taehyung.

-¿A dónde vas?

-Tengo que hacer unas cosas antes de entrar a clases.

-¿Te acompaño?

-No te preocupes, quédate con ellos. Nos vemos luego.

Tae no apartó su mirada de él hasta que desapareció entre la gente de la cafetería, con un sentimiento extraño formándose en su estómago.

-Yo también debo irme. Nos vemos.

Yoongi no esperó ninguna respuesta y se levantó rápidamente bajo el ceño fruncido de todos.

-¡Espera! -Escuchó a Jungkook pero el siguió su camino.

-¿Qué les pasa a todos hoy? -Preguntó Hoseok, extrañado, cuando el menor recogió rápidamente para ir tras él.