El asistente del Alfa ~KookV~

°~24~°

Cierta pelinegra se encontraba de muy mal humos hoy, ¿La razón?, Es que lleva más de treinta minutos intentando entrar al edificio sin tener éxito, los guardias la sacaban, a lo mucho llegaba a recepción y ya.

Suspiro cansada, le dijo a la madre de Jungkook lo que este hizo, sabía que la señora Jeon ya había hablado con Jungkook, pero a él le valía una mierda lo que su madre dijera, así que en ese aspecto la Alfa no estaba siendo de mucha ayuda. Sin más se dirigió a la casa de los Jeon, de camino pensaría en algo para poder acercarse a Jungkook.

Por otro lado dos Alfas se encuentran en la oficina, haciendo lo usual, checar, firmar documentos entre otras cosas. El azabache por algún motivo se sentía ansioso desde el día anterior, sus ansias aumentaron hoy ya que desde que fue por Taehyung a su casa hasta esta hora del día, el castaño no pronunció mucho, no hablaba tanto como usualmente, por lo que le pareció aún más extraño y se sentía aún más intrigado, Taehyung hoy estaba misterioso.

Lo miraba por cortos minutos, volviendo después su vista a los documentos, aún así no podía evitar distraerse al dejar su mente divagar y quizá pensar lo peor a lo que Taehyung le vaya a contar, reaccionó cuando el castaño dejo una pila de papeles sobre su escritorio.

— Termine.

— Ah sí, está bien, d-descansa un poco.

Taehyung asintió y se volvió a su lugar, Jungkook suspiro cuando vio que el castaño tomo más papeles y siguió revisandolos. Así pasaron las horas, ambos en silencio, el único sonido que se percibe es el del reloj haciendo tic tac.
Finalmente llegó la hora de salida.

— Taehyung… me vas… ¿Me vas a decir lo que sucedió ayer?

Suspiro —. Si… vayamos a mi departamento.

Taehyung terminó de guardar sus cosas y ambos salieron de la oficina, entraron al elevador y marcaron el piso al que irán, mientras tanto el teléfono de Jungkook sonó indicando una llamada entrante, ignoro la llamada al ver que era su madre, salieron del edificio, llegaron al estacionamiento y ambos subieron al auto del azabache.
Este comenzó a conducir.

Aparcó el auto una vez llegó al edificio, salieron y subieron hasta donde se encontraba el departamento de Taehyung, el castaño nervioso, abrió la puerta e invito a pasar al azabache.

— Me gusta tu departamento — dijo Jungkook fascinado con su alrededor.

— Gracias…

— Bien — se acomodo mejor en el sofá —. ¿Me puedes decir lo que pasa? — dijo suavemente tomado las manos del castaño.

— S-si… Umh… yo…

Jungkook se sentía preocupado al oler en el aroma del castaño su nerviosismo, acaricio suavemente las manos del castaño intentando tranquilizarlo.

Taehyung comenzó a contarle con dificultad, desde que fue con Somin hasta cuándo fue con Namjoon, le conto todo lo que el moreno le dijo. Al terminar suspiro mirando a Jungkook, este se encontraba con la mirada perdida, analizando cada palabra dicha por el castaño.

— T-tal vez pienses que es una tontería, pero es verdad… tal vez pienses que soy raro y…

Taehyung se comenzaba a desesperar por qué Jungkook no decía nada, ni siquiera lo miraba, se levantó del sofá para ir a la cocina mientras el azabache reaccionaba, al levantarse y dar un pasó fue detenido por Jungkook, que lo tomo del brazo.

— Entonces, ¿Es real lo que me dices?

— Si.

Se sorprendió cuando Jungkook lo abrazo, moviendo su cabeza como un gato, dejando salir más su aroma.