El asistente del Alfa ~KookV~

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Había pasado más de una semana desde que empezó a trabajar con Jeon, era peor que trabajar con Yoongi, ya no tenía vida social, ya casi no hablaba con JiMin ni pasaba tiempo con su novia, y eso es lo que más frustraba a Taehyung, trabajaba desde las 6 de la mañana y terminaba hasta las 8 de la noche o más tarde el trabajo, y para ponerle la cereza al pastel, la novia de Jungkook últimamente se la vivía en la oficina, era realmente molesto.

— Oye......... ¿Cómo se llama tu empleado?

— Kim Taehyung — dijo Jungkook sin levantar la mirada de los documentos.

— Kim, ahora que te observo bien, de verdad el día que tengas hijos realmente serán bonitos — decía sonriendo —. Tienes los ojos de un color bonito, muchas envidiarán a tu pareja.

Taehyung solo pronunció un "gracias".

— Espero que cuando Jungkook y yo nos casemos tengamos hijos bonitos — Taehyung pudo notar un brillo en sus ojos.

— ¿Sun-Hee puedes salir de la oficina? Debo concentrarme en esto — pronunció Jungkook con un tono irritado en su voz.

— Claro cariño — depósito un beso en su mejilla —. Nos vemos luego — salió de la oficina.

Jungkook suspiro, se recargo en la silla giratoria y echo su cabeza hacia atrás.

— Kim, tienes prohibido hablar con ella sin mi presencia ¿Entendido?

— Bien — dijo restándole importancia, ni que se la fuera a quitar, el ya tenía novia.

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Al terminar su jornada, salió del edificio, se dirigió al estacionamiento y pudo ver a JiMin recargado, comenzó a caminar más rápido con una sonrisa.

— ¡¡CHIM!!!!!! — gritaba eufórico.

— ¡¡¡TETE!!!!!!!

Finalmente ambos amigos se abrazaron, Taehyung levantandolo para darle vueltas en el aire y JiMin riendo, se dieron otro abrazo después de bajar a JiMin.

— Cuánto tiempo, ¿Cómo supiste dónde estaba?

— Fácil, le dije a Yoongi que me dijera, ya sabes, métodos — le dijo guiñandole.

Taehyung solo sonrió, al voltear hacia un lado, vio a Jungkook recargado en un auto, observandolos desde una esquina del gran estacionamiento, no despegaba su mirada, Taehyung volteó a observarse, viendo que JiMin tenía sus manos en sus hombros y el tenía sus manos en la cintura de JiMin.

— Bueno JiMin sube.

— ¿Podemos ir al supermercado?, Quiero comprar algunas golosinas.

— No me digas que....... — Taehyung subía y bajaba las cejas mientras sonreía.

JiMin se puso completamente rojo de la cara, dándole un pequeño golpe a Taehyung.

— Claro que no tonto, simplemente tengo ganas de comerlos — dijo abultando sus mejillas.

Ambos rieron y subieron al automóvil, cuando estaba por salir del estacionamiento pudo ver qué Jungkook los seguía observando. Después de unos minutos tras haber ido al supermercado llegaron al departamento de Taehyung, entraron y se sentaron en los sofás de la sala, JiMin puso todo lo que habían comprado en la mesita y Taehyung se comenzó a quitar los zapatos y a aflojarse la corbata.

— Wow! Taehyung-ah! Que sexy luces! — decía JiMin riendo, haciendo que sus ojos formarán medias lunas.

Taehyung comenzó a carcajearse, arrojando un calcetín a la cara de JiMin, este rápidamente lo aventó al suelo con cara de asco. Ambos cruzaron miradas y se volvieron a reír.

Así paso entre risas y bromas la noche, después de que Taehyung dijera que no tendrá trabajo el siguiente día, decidieron divertirse viendo películas y comiéndose las golosinas.

Eran las 11 de la mañana cuando Taehyung escucho que su timbre sonaba insistentemente, despertó viendo su alrededor, el estaba recargado en el sofá sentado en el suelo, JiMin en una posición rara en el sillón individual y los dulces regados en el piso, se levantó y camino hasta la puerta, abriendo está, instantáneamente la persona saltando sobre el.

— Taehyung!!! Cuánto te extrañe! — decía su novia repartiendo besos por todo el rostro de Taehyung.

Se adentro al departamento bajando a su novia, el rascándose la nuca nervioso y ella viendo todo el desastre, cuando vio a JiMin ahí volteó a ver a Taehyung, pidiendo una explicación con la mirada.

— E-estabamos viendo películas, aprovechando que hoy no trabajo.

JiMin despertó un poco desorientado, volteó a su alrededor viendo a Taehyung parado junto a alguien más.

— Ah Somin, cuánto tiempo — sonrie perezoso.

— Igual JiMin, es una casualidad volver a encontrarnos.

JiMin y Somin se sostenían la mirada, los aromas de ambos comenzando a ponerse pesados y eso a Taehyung comenzaba a incomodarle.

— Ah ¿Tienes hambre? — pregunta para aligerar el ambiente.

— No, comí antes de venir, pero por lo visto ustedes se acaban de despertar, asi que iré yo a prepararles algo — se fue a la cocina.

— Uuy~ temo que algún día me vaya a envenenar o algo — dijo JiMin fingiendo escalofríos.

— Es brava — Taehyung sonrió.