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- Yo no tengo nada que hablar contigo.
- Claro que sí. Se lo que le has hecho a Kagome, está impregnada de tu peste.
Sesshomaru se detuvo en seco. Sintió curiosidad de la afirmación del hanyo.

- Ah si? A ver, dime Inuyasha, qué se supone que le hice a la Miko?
- Te aprovechaste de ella, aprovechaste que estaba sola en el río y te aprovechaste de ella, por eso Kagome aceptó ir contigo, teme decir que no y a lo que tú puedas hacerle si se niega.
- Debo admitir que tienes una gran imaginación. Pero que te quede muy claro que jamás haría algo similar contra una mujer.
Y lo que pase entre los dos... no es de tu incumbencia.
- Deja de decir estupideces. Tu desprecias a los humanos Sesshomaru! Kagome jamás aceptaría ir contigo sino se sintiera obligada.  Además, cómo podría haber algo entre ustedes si ella me ama a mi?
- Estás seguro que aún te ama Inuyasha? Te ha confesado sus sentimientos? Dime, una cosa. Piensas realmente que Kagome ha vuelto por ti? Piensas que se conformaría solo con migajas? No fuiste capaz de tomarla como tú mujer cuando tuviste la oportunidad y no solo en una ocasión, tuviste muchas.  Preferiste quedarte con un engendro a una mujer que te amó y te siguió por tres años para después ser despreciada.
- Tsk! No te atrevas a llamar a Kikyo de esa forma! Desenvaina tu espada y pelea conmigo.
- Me haces reír Inuyasha, siempre que escuchas una incómoda verdad quieres solucionarlo peleando. Yo no tengo tiempo para juegos de niños. Déjala ir, es tiempo que la dejes ir, y no hablo en el sentido de retenerla en tu manada... ella no te pertenece... Kagome es mi mujer.
- Grrr... tu qué?
- Tu lo has dicho... está impregnada de mi olor. Porqué simplemente no lo aceptas y te dedicas a vivir tu vida y cuidar a tu mujer y tu futuro cachorro? Porque quieres seguir controlando la vida de Kagome sobre todo ahora que es mi mujer?  Sino le crees pídele que se quede, si así lo desea podrá hacerlo. Ahora déjame en paz sino quieres que acabe contigo! Sería una lástima que tu cachorro creciera sin un padre.

Inuyasha estaba iracundo, la ira lo estaba consumiendo, pero con la poca sensatez que tenía pensó que sería injusto preocupar a Kikyo en su estado y el no quería causarle ninguna molestia. Pensó que lo mejor sería hablar con Kagome, estaba seguro que ella estaba siendo obligada a ir con Sesshomaru. Porque en el fondo, el sabía que ella había regresado por el.  Inuyasha no espera que Kagome regresara al pasado o a sus vidas.  Y aunque no hubieran tocado ese tema sabía de los sentimientos hacia el. Así que decidió regresar a la aldea y saber qué estaba sucediendo. Inuyasha llegó a la aldea y tocó a la puerta.

- Kagome, puedo hablarte?
- Dime Inuyasha.
-.......
- Hablarás en algún momento?
Inquirió Kagome debido al silencio de Inuyasha. Este tomó un profundo respiro y habló.
- Dime porqué regresaste Kagome? Y no me mientas.
Kagome sabía a lo que se refería, pero no le daría más gusto a Inuyasha. En el pasado el la había despreciado en múltiples ocasiones, le había dicho que no podía dejar a Kikyo, que siempre la protegería, y que regresara a su época, otras veces lo escucho declarándole su amor y ella simplemente se negaba a aceptarlo y se aferraba con todo lo que tenía a ese sentimiento, pero había tenido suficiente. Al haber regresado y descubrir que Kikyo estaba viva y que ahora era la mujer de Inuyasha se prometió enterrar sus sentimientos. Había sido una tonta y sabía que eso tenía que acabar.

- Extrañaba mucho este lugar y a mis amigos. No podía resignarme a no volver nunca más. Yo también soy parte de este mundo. Y quise volver así fuera una última vez. Eso es todo.
- Y qué hay de mi?
- Qué hay contigo?
- No me amas? No regresaste por mi?

Kagome no podía creer lo que decía Inuyasha, simplemente era un egoísta.

- Inuyasha, realmente crees que yo podría seguir aferrándome a un amor que no me pertenece? Tu jamás me correspondiste cuando estabas solo, y ahora que tienes a tu compañera piensas que debo seguir amándote?
Eres un egoísta! Quieres mi amor, pero yo debería permanecer sola porque jamás podría estar contigo porque tu amor no me pertenece y tú no dejarías a Kikyo para estar conmigo, ademas no sería justo. Y tampoco aceptaría algo así.
Por supuesto que te amé, pero eso quedó en el pasado, si en ese tiempo no pudiste decidir, ahora no pretendas que yo esté siempre ahí para ti.

ERES MI MUJERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora