39

825 78 4
                                    

Kagome y Sesshomaru interactuaban muy poco. Y cuando lo hacían eran cosas referentes a Kyomi, o cuando la niña los ponía en situaciones de las cuales no podían huir.  A Sesshomaru no le molestaba la compañía de su mujer, pero ella mantenía su postura.  No cedería, le dolía mucho saber que él había estado con otra. Los momentos en que más tiempo pasaban juntos eran a la horas de las comidas, pero tampoco interactuaban mucho.  Sesshomaru por otro lado seguía con su actitud fría.

Una tarde Kagome se encontraba en el jardín, observaba a su hija mientras jugaba. Jaken llegó.
- Miko... el amo desea verte.
Kagome rodó los ojos. Jaken la miró con molestia.
- Odias al amo, no es cierto?
- No lo odio. Pero a ti qué te importa?
- A mi que me importa? Me importa mucho. Antes de que te conociera a ti yo tenía siglos a su lado. Cómo no podría importarme?
- No puedo creer que todavía sientas celos de mi Jaken.
- Eres una tonta Miko, tu nunca entiendes nada. En cambio yo entiendo de lo que se trata todo.
- A ver... que es lo que entiendes?
- Tu aún no has perdonado al amo porque estás segura que te abandonó.
- Esa parte la entendí muy bien Jaken, y créeme que no podría sentirme más mal sabiendo por todo lo que tuvo que pasar.
- Aja! Entonces no me equivoqué.  Es por lo de la concubina. Kagome le lanzó una mirada asesina.

- Admítelo!
- Se muy bien que tú tuviste que ver en eso de las concubinas. Ese es tu trabajo Jaken. Y sí... se trata de ella.  Jamás le perdonaré que haya estado con otra mujer.
- Sabes lo que fue para el señor Sesshomaru haberte perdido?
- Y por eso debía estar con otra?
Kagome estaba muy furiosa.
- Aún no lo entiendes verdad? Qué fue lo que el amo te dijo sobre Yukichi?
- No me dijo NADA Jaken! Lo descubrí yo sola mientras le decía que no podía seguirla viendo porque yo había regresado, mientras ella le imploraba porque lo amaba.
- Escúchame bien Miko... te lo diré una sola vez, espero que lo entiendas. Porque no arriesgaré mi pellejo dos veces.

- Cuando la batalla terminó el amo se volvió irascible, su instinto se había apoderado de él. Ya te había mencionado que anduvo errante por varios meses. Pero no solo anduvo errante.  Estaba tan lleno de ira, que comenzó a hacer masacres. La gente lo miraba pasar y comenzaban a atacarlo con la intención de eliminarlo, en otros tiempos el amo solo lanzaba una señal de advertencia pues sabía que infundía temor y que los humanos sentían miedo al verlo,  pero en ese tiempo reaccionaba por instinto, como cuando un animal es atacado. A nuestros oídos llegaban informes de que una aldea había sido exterminada o alguna región había sido destruída, la situación empeoraba cuando llegaba el periodo de celo.  Nadie se atrevía a intervenir. El amo se volvió más fuerte, más poderoso después de la batalla con Takemikazuchi pues absorbió una parte de sus poderes. También te mencioné que cuando un Yokai entra en su periodo de celo su nivel de deseo sexual aumenta al triple. Pues el amo no es un Yokai cualquiera, eso no te lo tengo que decir.  Si un Yokai no tiene una compañera con quien calmar sus necesidades se vuelve agresivo.

Ahora piensa en cómo se encontraba el amo en ese momento. No pensaba en ninguna hembra, pero su dolor combinado con su agresividad en ese momento era devastador.  Las concubinas intentaban calmarlo ofreciéndole calmar sus ansias durante su periodo de celo... pero todas terminaron muriendo a manos de él. Fueron dos años en los que vivíamos en el filo de la espada. Hasta que un día el escuchó una conversación que tuve con Takeo.
- Qué tipo de conversación?
- Estábamos muy preocupados por el, nadie se atrevía a hablarle. Takeo me sugirió que consiguiera nuevas concubinas para los soldados y también para el. Quizás eso lo ayudaría a calmarse un poco. No podíamos negar el hecho que el antes despreciaba a los humanos, pero cuando te conoció todavía eras humana. Fue cuando él dejó de asesinar humanos por placer o aunque tuviera un motivo para hacerlo, porque sabía que era algo que tú no aceptarías.

La decisión de amo de pedir una concubina no fue fácil. Pudo darse cuenta que estaba causando mucho daño. Entonces me pidió que le consiguiera una concubina, que fuera pura y que no hablara.
- Que no hablará?
- Ya tenía que estar con otra que no eras tú ahora imagínate si la escuchaba hablar. No habría durado viva mi medio segundo. Ya deja de interrumpirme porque no te lo repetiré dos veces! En resumidas cuentas... tuvimos que llevarla con el chamán para que le diera un brebaje que le ayudara a resistir el periodo de celo del sommo, sobre todo ahora que su fuerza y sus poderes se habían potenciado.
- Porqué tenía que ser pura Jaken? Eso me molesta mucho... seguro si era pura debía ser especial para el.
Jaken le dio con el bastón en la cabeza. Kagome se enfureció pero soportó porque necesitaba saber.

ERES MI MUJERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora