ERES MI MUJER

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Advertencia: este capítulo es para mayores de  +18 por su contenido un poco subido de tono.

Shesshomaru entró al comedor done Rin y Kagome lo esperaban. Los ojos del Yokai brillaron al ver a su mujer. Ella no tenia idea que para él habían pasado casi cuatro meses sin verla. Estando en el inframundo el tiempo corrió más rapidamente, para ella había pasado solo un día. Sesshomaru acarició la cabeza de Rin. Cuando se acercó a su mujer la abrazó con sentimiento. La sorpresa fue grande para ella. Sesshomaru no solía ser afectuoso en público, tampoco que se desbordara de amor en privado, pero a solas solía soltarse un poco más. La abrazó y respiro el olor de sus cabellos.

Rin al ver esa escena se sonrojó y tapó su boca con ambas manos mientras reía en silencio.

~Creo que el señor Sesshomaru se ha enamorado de la hermana Kagome... pensó la pequeña Rin.  El Yokai se sentó a la mesa y comenzaron a cenar, parecía que acabaría con todo, estaba devorando todo lo que colocaban sobre la mesa.
- Al parecer hoy tienes un gran apetito! mencionó la joven mujer
- Siento como sino hubiese comido en cuatro meses... respondió Sesshomaru.
- Esta mañana olvidaste tu estola.
- En realidad la dejé para ti. Estabas abrazada a ella y pensé que podías tener frío. La azabache se sonrojó mientras en sus labios se dibujaba una pequeña sonrisa. - Sí la verdad es que es muy suave y calientita. Mañana Rin y yo haremos un picnic... quieres acompañarnos?... Sesshomaru estaba en silencio con su expresión de siempre, pero nunca había escuchado una cosa similiar de hecho no sabía a qué se refería. Kagome pudo notar la confusión que había en su mente, eran costumbres del mundo moderno no del sengoku. Pensó que lo mejor sería explicarle.
- Un picnic es un paseo al abierto. Eliges el lugar que mas te guste, una pradera, un jardín o un lago, llevas alimentos y bebidas y pasas el día disfrutando del momento agradable y de la compañía, en este caso Rin y yo... lo último lo dijo sonriendo.
- Eso es un qué dijiste?
- Un picnic... Es una costumbre en mi época, normalmente se hace entre amigos o familiares. Pero si estás ocupado entiendo, será para otra vez.
- Lo haremos.
Kagome no podía ocultar su felicidad!  Era tanta la emoción que se acercó al Yokai y le dio un tierno beso en la mejilla rozando sus marcas. Sesshomaru cerró sus ojos y frunció el ceño mientras apretaba sus mandíbulas. Ese beso aparte de inesperado hizo que todo su cuerpo vibrara. Cerró una de sus manos en un puño, las venas de su frente se saltaron.
Kagome sintió un golpe al estómago. Se sintió herida. En su mente se formó la idea que ese gesto había molestado al demonio, haciéndola sentir rechazada. Sesshomaru respiró profundo  y su cuerpo se relajó nuevamente. Tomó un sorbo de saké y se levantó.
Kagome se mantuvo en silencio y terminó su cena. Rin también terminó su cena.

- Bien Rin, ahora ve a dormir. Mañana pasearemos un día estupendo.
- Si señorita Kagome, creo que no dormiré de la emoción. Aún recuerdo la última vez que usted preparó un picnic con todos los de la aldea. Fue tan divertido. Usted preparó tantas cosas deliciosas.  Lo único que no me gustó fue que Inuyasha y Shippo acabaron con todo.
- Cómo olvidarlo....replicó Kagome.
Y las dos estallaron en carcajadas.

Sesshomaru se dirigió a su habitación, debía poner el elixir en un lugar seguro.
Kagome se dirigió a su habitación, se preparaba para dormir. Se desvistió. Se quedó solo con el fundoshi ( una pieza que hoy sería como las bragas/panties/calzones) El resto de su cuerpo estaba completamente descubierto, dejando a la vista sus atributos.
Sesshomaru entró a la habitación en ese momento. Lo primero que saltó a sus ojos fueron los voluminosos pechos de Kagome y su angosta cintura.  Ella como pudo se cubrió y tomó el jubán para cubrirse. Sesshomaru no le quitó los ojos de encima, cosa que la hizo ponerse muy nerviosa. Su semblante era serio y su mirada fría.