No te metas en donde no te llaman. No busques tres pies a ningún gato.
Ignora los problemas de los otros. ¿A ti qué te da lo que les pase?
Del mejor mentiroso todo se tragan. Si te equivocas, actúa como pato.
¿Quieres renunciar a tus logros?? ¿O quieres pasar a la siguiente base?
Si ya el LAB-8 podía tener problemas con el asunto de la evasión fiscal, estaba en tus manos causarle un desastre con una llamada a cualquier organización no gubernamental, si tu caso tuviera alguna repercusión mediática. Pero, como no podía ser de otra manera, no te quedó otra más que cumplir con las labores del día: lamer más sobres hasta terminar con la lengua entumecida. Toda una labor a la altura de tus enormes dotes intelectuales, si nos ponemos sarcásticos.
Pero, como siempre, estabas atento a otras cosas. En primer lugar, a obtener esa condenada evidencia, de cualquier forma. Y tan pronto viste una oportunidad, te esfumaste del laboratorio, disfrazado convenientemente de cualquier estudiante apenas unos pocos años menor. Ya era hora de poner en marcha tu improvisado plan:
Lo primero fue hacerle una visita a la insólita huésped en tu habitación de alquiler; en principio ya tenías cierto plan de involucrarla en tu plan de obtener evidencias contra una horda de temerarios abusones de escuela. También debías estar absolutamente seguro de que no había causado incidente alguno. Ni siquiera los autómatas eran de fiar.
Sorprendentemente, todo estaba tal y como lo habías dejado. Ningún roomie había sido siquiera lastimado, ni había mayor destrozo fuera de la heladera estropeada. Nada, de hecho, todo estaba perfectamente ordenado y limpio. Ya sólo faltaba abrir la puerta de tu habitación para estar absolutamente seguro de que todo estaría bien.
Nada más seguro que tener encima casi doscientos kilos de metal inmediatamente después de hacer girar el picaporte.
—¡Déjame ir! —Por más que te esforzabas en zafarte, la mecánica criatura no se movía ni un milímetro. Te mantuvo bien sujeto contra el piso, de las cuatro extremidades. Empezó a dejar salir unos horrendos ronroneos. Luego, en total contradicción con su habitual conducta, te ayudó a levantarte. Ahí descubriste lo ordenado y limpio que había dejado tu cuarto; hasta reparó el agujero del ventilador, y sin coste extra. Era casi seguro que pasó mucho tiempo recargándose a costa de la modesta corriente eléctrica del departamento. Pero, con el consumo habitual entre servicios de streaming, LAN parties y otras aficiones menos confesables, no se habría notado mayor diferencia.
—Deben faltarte unos tornillos. —Tus primeras palabras tras recobrar el aliento y la presencia de espíritu. — Si pudieras ayudarme con un problema, te perdonaría.
—Por favor espere. Resolviendo matriz. —Adoptó un aire serio, por primera vez en mucho, mucho tiempo. Finalmente te pareció que se le encendió una bombilla y aceptó.
—¿Puedes grabar algo?
—"¿Puedes grabar algo?" —Demostró que sí podía, reproduciendo punto por punto lo que habías dicho anteriormente; debía tener un grabador de voz en algún sitio. Justo lo que estabas buscando para tan arriesgada empresa.
Tuviste un pequeño momento de desconfianza, como persona juiciosa que eras; ninguna cautela era poca cuando se trataba de asuntos cercanos a Carol, Painwheel, espécimen PW-36E-25-40 o cualquier otro nombre. Pero, claro, todo esto quedaba fuera de la misión. Y ninguna ayuda era desdeñable.
Así que, siguiendo un improvisado plan, te dirigiste con el animado simulacro de gata a la escuela, con el afán de no quitarle el ojo de encima a "cierto alguien". Ahora, el problema era entrar: en tu caso no había mucho problema, teniendo cara de niño todavía, y convenientemente vestido con una imitación perfecta del uniforme. Si te colocabas cerca de un grupito de muchachos, habrías pasado absolutamente desapercibido. Bien, eso podría solventarse confiando en los felinos reflejos de la metálica criatura; el otro problema, más grande, era saber qué seguía. Entrar tocando de aula en aula no era opción; mucho menos asomarse indiscretamente por todos los rincones. Algo faltaba en tu apresurada estrategia.
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Por amor... ¡Hasta la locura! (Painwheel x Lector)
FanfictionTras la derrota de la Skullgirl nada sería igual en New Meridian. Eso incluye a una pobre inocente usada como arma. ¿Podrá encontrar alivio a su tormento gracias a un sacrificado voluntario? Portada por @Sieben_Wege (NB: Cualquier cosa en esta hist...