¿Qué es la moral?

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De mi lado están la técnica y la ciencia

Es la bilogía mi guía, mi pastor y mi conciencia.

Yo declaro a mi bienestar la máxima conveniencia

¿En dónde residirá, pues, la más grande benevolencia?


Los tres pillastres, es decir el rechoncho deshonesto, el delgaducho perverso, y el debilucho piltrafilla siguieron diligentemente las enormes pisadas. Seguían todas en línea casi recta desde las cercanías del bosque hasta un prado, coloreado por las amapolas meciéndose por el viento sobre tierra negra. Pasaron cerca de algunas áreas sembradas con girasoles, de tamaño tan desmesurado que podían usarse como el curioso objeto que cargabas a cuestas. En momentos breves detectabas, al igual que él, movimiento entre la altísima hierba, quizás algún conejo. Todo era muy natural, rústico e inquietante para tu urbana y civilizada sensibilidad, tan adaptada al ruido de una urbe como New Meridian. Aquí no había tráfico, ni siquiera tractores. Más lejanas, esas salvajes cumbres nevadas, desafiaban tu pensamiento, tan ávido de fotografías "coloreadas" artificialmente tomadas por el telescopio o el microscopio.

Para contemplar paisajes o reflexionar si esto era más real que el campamento de verano, había otro rato. Estabas para ayudar a la malvada cabeza de pomelo a escapar, y luego, a seguir tu incierto destino. Ayudar a otros en el camino no entraba en tus pesadas obsesiones. Ante todo, bien lo sabías, aquellos con un complejo mesiánico duraban poco en la carrera. Y el tratar con los peculiares habitantes de un laboratorio secreto hacía replantearse, seriamente, varias cosas hasta al más pintado. Ir en serio, en todo, era jugársela.

—¡Uff! ¡Hagamos una pausa! —El "pastor" Lawrence se echó sobre un pedrusco, a la sombra de una de las gigantescas flores.

—¡Está bien, está bien! —Su colega compartió la iniciativa, y se apoyó sobre un grueso tallo. Los dos sujetos parecían observar más a detalle tu armadura. Debieron tomarse en serio las posibilidades para los no tan favorecidos atléticamente.

"¡No es el momento de descansar!" —Raro en ti no desear escaquearse, otra de las especialidades de los pre-especialistas médicos

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"¡No es el momento de descansar!" —Raro en ti no desear escaquearse, otra de las especialidades de los pre-especialistas médicos. —"¡Terminemos de una vez!"— Iniciativa impotente para iniciar nada, de nada valía desear. Ambos estaban tumbados a la bartola, para mayor impaciencia tuya. El "debería" no nacía de un hecho, sino de un fin...

"¿Y entonces, no existe moral objetiva?" —Seguiste el hilo en tu ajetreada cabeza. —"No se puede deducir un debería de un es, porque el debería está implicando una finalidad, y eso no existe fuera del cerebro humano... si entonces la finalidad no la dicta alguien, o algo, no la hay. Luego, no hay debería. Luego, no hay moralidad objetiva. Luego, toda moralidad es subjetiva. ¡Metafísica! ¡Qué asco! ¡No es siquiera una ciencia! ¡Es una astracanada, obsoleta e inútil como la astrología y demás cosas similares! ¡Para nada! ¡No soy metafísico! Estoy examinando hechos objetivos... sobre temas subjetivos. La metafísica no puede responder para nada a las incógnitas de la ciencia, pero la ciencia sí que puede responder a las de la física, la única que hay. Y a todas las demás disciplinas, porque no pretende tener la palabra final, a diferencia de otras cosas. Bueno... ¿Y quién o qué tendrá la palabra final en la cuestión de la moral? Si no la hay, mayor razón para pensar en que es algo subjetivo. Eso no deja en buen sitio a una educación con valores... porque eso varía de sociedad a sociedad... claro, la mejor es la que ponga a la altura de mandamientos el respeto por los demás, y el reconocimiento a que todos lleguen a ser lo que se propongan ser... creo que eso es objetivo, racional y falsable. Por otro lado... haría falta medios para garantizarlos... medios materiales y concretos... en otras palabras, fuerza y presión... no es lo ideal, pero sí lo mejor de lo que se dispone. No imagino a Patri... es decir, esa locuela aficionada a los cigarros sentarse a dialogar con una skull girl, ni aunque fuera su mejor amiga de toda la vida. Le debo una disculpa, ella entiende lo útil. Nada menos. Lo mismo podría decir de... err... mejor cambiemos de tema antes de tener otra alucinación menos confesable. Es curioso, como los peores enemigos de Canopy suelen ser los peores villanos, los más grandes tiranos. El verdadero mal del mundo... no tiene qué ver aquí ningún interés particular. Pero... ¿Quién lo ha dicho? Yo no me creo eso de que una rama de la ciencia es más peligrosa entre más útil se declara... yo no creo, yo siempre dudo."

Por amor... ¡Hasta la locura! (Painwheel x Lector)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora