Los días parecían ir en repetición uno tras otro. Un bucle horrible que estaba llamando vida.
Levantarse, ducharse, desayunar, ir a la universidad, esconderse de su ex novio y volver a su departamento.Lo de esconderse debía acabar, lo sabía. Habían actividades en conjunto que planificar, pruebas y trabajos que revisar, discutir sobre qué autores y libros usarían para la próxima unidad.
Por eso ahora estaba esperando a Soo-ah en la cafetería de la universidad. Era el único lugar con suficiente gente que se le había ocurrido para citarlo.
El café que había pedido estaba a un lado y por toda la mesa tenía libros que había esta releyendo que creyó que podían ser útiles. Solo necesitaba un aprobación y listo.
Estaba fingiendo hojear uno de los libros cuando Soo-ah se sentó frente suyo. Su rostro no demostraba emoción, estaba bien peinado y su traje estaba finamente planchado. Todo en el hombre gritaba éxito y superioridad y Seokjin estaba batallando con el impulso que lo hacía sentirse pequeño e inexperto.
- Tengo media hora antes de una clases - eso Seokjin ya lo sabía, tenía memorizado el horario desde que comenzó el semestre.
- No te tomaré mucho tiempo. Aquí tengo 8 libros todos me los leí y creo que son importante para la próxima unidad me gustaría que me ayudaras a decidir cual seleccionamos y que partes son relevantes... - había dicho todo eso casi sin pausas casi con temor por que el hombre comenzará hablar -... Se que este es tu favorito así que obviamente leerán varios capítulo pensé en el 2, 4 y 6 - siguió hablando mientras le enseñaba los capítulos que ya tenía previamente divididos.
- Tienes razón ese libro me gusta, por eso mismo ya no lo usaremos. Cuando uno tiene mucho tiempo algo se termina por aburrir - y Seokjin podía ver una doble intención en sus palabras, pero sólo optó por guardar silencio - esta es la nueva lista que quiero que leas - siguió tendiéndole una simple hoja impresa con 7 títulos de libros que jamás había leído.
- La próxima unidad comienza la próxima semana no puedo leer todo esto en ese tiempo - quería tirarle los libros por la cabeza, decirle que era un despechado terrible y que no sabe en qué momento se enamoro de él.
Pero como acostumbraba se guardo todos esos pensamientos.- Si el niño no se siente preparado para un trabajo verdadero puede renunciar y cobijarse en los brazos de sus padres... no espera, verdad que ya eres un adulto - sabía que debía renunciar. Nadie podría cuestionarle nada. Pero ¿por qué debía dejar que Kang ganará? No quería dar su brazo a torcer y si debía leer todos esos libros lo haría solo para no darle en el gusto.
- Solo lo haces por despecho - no le importo estar en medio de la cafetería. De hecho esperaba que alguien escuchara solo para avergonzar a Soo-ah por su actitud.
El hombre le dio una mirada enojada y soltó una fingida risa - no te creas tan importante Seokjin, he sentido más libertad al estar sin ti - le decía y se acercaba unos centímetros a su rostro para hablar más bajito solo para que Seokjin escuchará - es una alegría no tenerte llorando todo el día por lo injusto que es el mundo contigo - y pudo percibir en cada palabra la intención de dañarlo.
- Estas siendo hiriente - no supo si en su voz había decepción, resignación o sí siempre supo que Kang podía ser así de malvado.
- Solo lee los putos libros - el hombre dio por finalizada la conversación y se puso de pie con la gracia y elegancia que lo caracterizaba para antes de irse agregar - espero hasta el domingo por el correo con los capítulos que usaras para cada clase - y pasaron 10 segundos en los que Seokjin se estuvo debatiendo si era adecuado mandarlo a la mierda en medio de la cafetería de la universidad.
Pero así como vino esa idea se fue al ver el cambio de actitud de su ex pareja.
Paso de tener el entrecejo fruncido a suavizar sus expresión y casi sonreír cuando volvió hablar, pero está vez no lo hacía mirando a Seokjin.- Señor Jeon estaba pensando en usted - cuando esas dulces palabras salieron de Kang, para Seokjin fue casi como si tuviera una revelación en ese preciso momento.
Sintió tantas ganas de vomitar, de llorar, de pegarle a Kang y de proteger a Jeon.
- Hola profesor - escucho como Jeon tartamudeo a solo unos dos metros de su mesa.
Esa imagen de Jeon solo dejó todo más claro. La diferencia de poder que siempre ha existido y existirá entre un profesor y su alumno estaba ahí presente.
Con Kang con su fino traje y mirando al resto como si fueran inferiores, frente aun Jeon vestido de jeans rotos y desteñido con los lavados, con su pelo alocado y una vieja mochila que colgaba de uno de sus hombros. Luciendo joven y impresionable. Luciendo tal cual como Seokjin hace solo unos años.
Y darse cuenta de eso solo provocó que crecieran aún más las ganas de devolver el poco café que había bebido.
- Pensó en mi propuesta para mejorar sus notas, se lo importante que es para usted seguir con su beca - pudo ver como Kang se acercaba unos pasos a Jeon. Y puedo ver como el chico estaba claramente incomodo con el repentino acercamiento.
Ver la escena fue como verse a su mismo hace varios años atrás. Fue verse ilusionado porque un hombre inteligente como su profesor le daba atención.
Fue verse ilusionado por todo el conocimiento que estaba adquiriendo y como gracias a eso personas mayores lo dejaban de ver como un niño universitario que no sabía nada.Fue sentir de nuevo que encajaba en algún lugar y mirar casi con desprecio a sus compañeros que sólo pensar en fiesta.
¿Que había de malo en pensar solo en fiesta? Nada, absolutamente nada, pero Seokjin había caído en la superioridad moral que le había dado el que personas mayores y cultas lo agregarán a su círculo de sociabilización.
- Me disculpo profesor no he tenido tiempo para pensar - se excusa él chico y luego dirigía su mirada hacia Seokjin y le regalaba un cordial - buenos tardes profesor Kim.
Y todo lo que pudo responder Seokjin fue un ahogado - Jeon - que casi ni se escucho en el bullicio de su mente.
- Sabe que puede pasar a mi oficina más tarde si tienen alguna duda - le ofreció con una voz tan amable que Seokjin casi había olvidado que Soo-ah podía sonar así - nos vemos profesor Kim - y salió de su vista con rapidez, casi en un parpadeo.
Cuando medio salió de su estupor comenzó a buscar a Jeon con la vista, lo visualizo varios metros más adelante.
Guardo los libros en su mochila con rapidez y dejó su café ahí en la mesa antes de casi correr para alcanzarlo.- Jeon, Jeon - lo llamó dos veces hasta que el chico se diera la vuelta y lo mirará bastante sorprendido.
- Estoy un poco atrasado - intento excusarse el joven, pero Seokjin no lo dejó continuar.
- Lo que sea que te ofreció no lo aceptes - estaba siendo brusco con sus palabras, lo descubrió cuando Jeon cambió su reacción en segundos de una casi asustadiza a una de burla.
- ¿Esta celoso? - podía mentirle y decirle que si. Podía decirle que no se acercara a su hombre y asustarlo con alguna amenaza sin sentido, pero sabía que Jeon era más inteligente que eso.
- Solo créeme que Soo-ah solo es amable cuando quiere algo y se por experiencia propia que no se cansa hasta obtenerlo - esperaba que el chico entendiera. Que no cuestionara nada, pero sus esperanzas murieron cuando el chico le aseguró que sabía lo que hacía y que no necesitaba consejos que no había pedido.
Y solo se fue, dejando ahí, en medio del pasillo solo y con muchas razones por lo que no era adecuado que se acercara a su ex novio. Lo había intentado y solo había parecido un celoso frente a los ojos del joven estudiante.
Jungkook se caracterizaba por ser alguien impulsivo. Y eso mismo lo tenía a sólo unos metro de la oficina de Kang. Luego de fingir que no iría a taller de danza para estudiar un poco para una prueba que no existía.
No le apetecía hablar con Kang. Ni aceptar ninguna propuesta. Pero ver al profesor Kim tan decidido porque no aceptará solo le hizo tener más curiosidad por ver cuando celoso se podía poner un profesor de un chiquillo como él.
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Teach Me ( KookJin)
FanfictionAl final del día Seokjin dejaba caer esa fachada dura y de que nada le importaba y solo se acurrucaba con su gato. Jungkook nunca se había interesado en ver más allá de la mascara de seguridad y soberbia que demostraba el ayudante que le impartía lo...